El argentino ganó un lugar en la partida y después se dedicó a girar en una pista en la que es imposible superar autos. Taylor Barnard se quedó con la victoria. Joshua Duerksen estuvo complicado.
Las clasificaciones y las largadas eran los ítems que Franco Colapinto tenía en la columna del debe en las tres primeras carreras de la temporada de Fórmula 2. El argentino llegó a Europa con el objetivo de mejorar esos dos rubros. En Imola, todo quedó bajo la sombra de su sensacional triunfo, con una maniobra de antología en la superación sobre Paul Aron en la última vuelta para sellar el festejo. Sin embargo, el piloto del equipo MP avisó, en medio del festejo, que todavía le quedaban esos aspectos para limar. Y logró el combo perfecto en Mónaco, nada menos, cita anotada como la quinta fecha del 2024.
En la qualy del viernes, el argentino se metió tercero en su grupo para ser quinto en el total, su mejor clasificación en la categoría. Y en un lugar clave, porque pasar autos en Mónaco es imposible, si no es que el de adelante comete un error, y grosero. Porque hasta con roce a un gaurd-rail se pude sostener la posición. Con el resultado, Colapinto debía partir desde el sexto puesto en la primera carrera del fin de semana.
Le quedaba el segundo examen, la partida. ¡Y lo aprobó con nota superlativa! El argentino movió sensacional (su mejor largada del año) y superó a Roman Stanek en Sainte-Dévote, aprovechando su gran movida inicial. Sí, al integrante del programa de desarrollo de Williams hay que darle un premio por haber superado un auto.
Después se trató de girar. “Espero una carrera aburrida”, había dicho Colapinto el sábado. Y, en cuanto a superaciones, lo fue. Pero fue movida por los incidentes. Hasta el argentino anduvo complicado al cortar la chicana de la piscina. Durante la carrera hubo dos ingresos del auto de seguridad, un auto de seguridad virtual y hasta una bandera roja, a seis giros del final, por el choque entre Zak O’Sullivan y Zane Maloney en La Rascasse. La competencia se reanudó después de cerca de 20 minutos de espera y se completaron los giros que quedaban, sin modificaciones. Taylor Barnard completó la faena para el primer éxito en F2 del equipo AIX, el mismo en el que corre Joshua Duerksen.
El paraguayo había logrado avanzar, gracias a los abandonos, pero quedó envuelto en un choque con Richard Verschoor por el que los comisarios deportivos lo encontraron culpable y lo sancionaron con diez segundos. Así, el asunceño fue 18º y último entre los que completaron la carrera.
Para Colapinto, la mitad del fin de semana de Mónaco le sirvió para rendir con éxito las materias pendientes. Ahora deberá refrendar todo con un buen cierre en la carrera feature para continuar con su ascenso en la tabla de posiciones.