Si pensamos en el cierre patronal que en su mayoría ha cerrado la temporada baja del béisbol como un receso de vacaciones, no es tan malo, ¿verdad?
Durante un par de semanas, a fines de noviembre y hasta el primer día de diciembre, la transferencia de transacciones fue muy activa. Y entonces: nada. La ventaja es que, con los rosters de 40 hombres en hibernación, nos da muchas oportunidades para distinguir lo que sucedió hasta ahora y sugerir lo que debe suceder cuando la maquinaria del béisbol comience a funcionar nuevamente. Es como repartir calificaciones a medio plazo.
Para la observación de acciones de hoy, estamos repartiendo esas calificaciones en función de un criterio: ¿cuánto han cambiado las posibilidades que tiene cada equipo de ganar un banderín en 2022 desde que comenzó la temporada baja? El uso de este criterio genera algunas clasificaciones de aspecto salvaje, pero es bueno mezclar las cosas de vez en cuando.
Los equipos que obtienen mejores resultados son los agresores. Los equipos que lo hacen peor son los equipos contendientes que en su mayoría se han sentado en sus manos hasta ahora durante la temporada baja. Cuando un equipo agrega un buen jugador, aumenta sus posibilidades de banderín, pero esas oportunidades deben salir del balde de otra persona. Por lo tanto, un buen equipo (como los Dodgers) que no ha hecho mucho verá erosionadas sus posibilidades.
Por encima de todo, recuerde que estas son solo instantáneas de mitad de período, no la última palabra en la temporada baja. Para cada equipo, cuando finalice el bloqueo, habrá tiempo para arreglar lo que está roto, pero también para romper lo que se ha arreglado.