Kelce ha vuelto a aparecer en su mejor versión en esta postemporada. En los últimos dos partidos, registró 16 recepciones para 191 yardas y tres touchdowns.
LAS VEGAS -- Con gran poder, viene gran responsabilidad.
Si su carrera terminase mañana, Travis Kelce ya sería catalogado como el mejor ala cerrada de la historia por la vasta mayoría.
Aquellos que no estén de acuerdo, se inclinarían por Rob Gronkowski, y destacarían sus mayores atributos como bloqueador.
Pero entienden a dónde quiero llegar; estamos hablando de un jugador históricamente bueno en su posición.
De hecho, Kelce llevaba siete temporadas consecutivas con más de mil yardas, antes de quedarse corto de ese número redondo esta campaña.
Tuvo 93 recepciones para 984 yardas con cinco touchdowns. Números que cualquier ala cerrada envidiaría, pero, en el caso de Kelce, destapó otro tipo de conversación.
Considerando que Kelce tiene 34 años, y su producción bajó para sus increíbles estándares, se instaló la pregunta: ¿Se acerca el retiro?
“No tengo ninguna razón para dejar de jugar al fútbol americano”, sentenció Kelce. “Amo este deporte, y seguimos teniendo éxito”.
Uno imagina que en parte la pregunta también se instala, por su mayor participación en los medios de comunicación, y su noviazgo mediático con la famosa cantante Taylor Swift.
A partir de esto, los “sabelotodo de redes sociales” asumen que “ya no está enfocado en el deporte”.
“He sido muy afortunado por poder hacer cosas fuera del deporte que me hacen feliz”, admitió Kelce. “Estar en televisión es potencialmente otra carrera, pero lo veo muy a futuro. Todavía me queda mucha gasolina”.
Mientras tanto, Kelce ha vuelto a aparecer en su mejor versión en esta postemporada. En los últimos dos partidos, registró 16 recepciones para 191 yardas y tres touchdowns.
Él y su mariscal Patrick Mahomes superaron a Tom Brady y a Gronkowski como el dúo con mayor cantidad de touchdowns en playoffs; tienen 17.
Y a la semana siguiente, en el Campeonato de Conferencia, también aparecieron los récords individuales.
Tras una recepción de ocho yardas en la primera mitad ante los Baltimore Ravens, Kelce superó el récord de mayor cantidad de recepciones en postemporada del legendario Jerry Rice.
Esa histórica atrapada fue la número 152 en playoffs para Kelce, superando uno de esos récords que nunca pensé que serían superados.
Su reacción inicial tras el partido había sido energética, fiel a su estilo, pero ya con unos días más para interiorizarlo, habló del récord a días del Super Bowl.
“Mis respetos para el enorme Jerry Rice”, dijo Kelce. “La verdad es que un orgullo haber logrado ese récord”.
Entiendo que sus números fueron tan dominantes como en otras temporadas, pero las conversaciones sobre un cierto declive me parecieron prematuras, y, en algunos casos, malintencionadas.
Kelce salió a callar bocas en estos playoffs.
“Nunca hay que preocuparse por si Travis va a estar listo”, explicó el entrenador en jefe Andy Reid. “Siempre tiene la energía, y siempre está listo cuando lo necesitas”.
Ciertamente, Kansas City Chiefs lo va a necesitar este domingo, considerando que San Francisco 49ers tiene uno de los mejores dúos de linebackers de la NFL, que podrían significar un reto para ala cerrada de los Chiefs.
“El año pasado sentía que estaba en la cima del mundo tras ganar el Super Bowl”, concluyó Kelce. “Este año me siento más arriba todavía, y vamos a ganar otro anillo”.