Las movidas financieras se realizaron con el objetivo de ayudar financieramente a Dallas a acomodarse por debajo del tope salarial
FRISCO -- Los Dallas Cowboys han comenzado su marcha hacia el cumplimiento del límite máximo bajo el tope salarial de la NFL.
Los Cowboys reestructuraron los contratos de Dak Prescott y Zack Martin este martes, creando más de 22 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial, anunció el club.
La movida de Prescott ya estaba planeada cuando el quarterback firmó su enorme convenio el año pasado. Los Cowboys agregaron dos años rescindibles al contrato de Martin para permitirles la oportunidad de conseguir más espacio este año. Prescott tenía un impacto contra el tope salarial de 34.45 millones, y el número de Martin contra el tope salarial era de 20.191 millones de dólares.
Luego de colocar la etiqueta de jugador franquicia de 10.9 millones de dólares sobre el ala cerrada Dalton Schultz, los Cowboys deben crear más espacio para acomodarse por debajo del tope antes del inicio del nuevo año de la liga, la semana que viene. Podrían buscar reestructurar más contratos, liberar a jugadores, o solicitar rebajas salariales.
El ala defensiva DeMarcus Lawrence ya ha declinado un recorte de sueldo, de acuerdo a fuentes múltiples, y el equipo espera escuchar del ala cerrada Blake Jarwin respecto a un recorte salarial, luego de que se sometiera a una cirugía mayor en la cadera el mes pasado.
Lawrence está por cobrar 19 millones de dólares para la próxima campaña, y contaría por 27 millones de dólares contra el tope. Con Randy Gregory y Dorance Armstrong a punto de llegar al mercado abierto, los Cowboys no necesitan hacer un movimiento inmediato con Lawrence.
Aunque la cantidad del recorte solicitado a Lawrence no se conoce, cuando los Cowboys han pedido a jugadores recortar sus salarios en el pasado, han ofrecido la posibilidad de recuperar parte de ese dinero a través de incentivos.
La semana pasada, ESPN reportó que los Cowboys "probablemente" se desprenderían del receptor abierto Amari Cooper, y que estaban "cerca" de renovar con el receptor abierto Michael Gallup.
Cortar o canjear a Cooper liberaría 16 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial, y necesitaría hacerse antes del 20 de marzo, dado que su salario base de 20 millones de dólares para el 2022 quedaría completamente garantizado al quinto día del nuevo año de la liga.
Gallup se recupera de una rotura en el ligamento anterior cruzado sufrida en la recta final de la temporada pasada, pero los Cowboys esperan que esté listo para la acción de juego para septiembre. Han tenido pláticas productivas con su agente respecto a un contrato a largo plazo, y hay esperanza de que algo suceda antes del arranque de la agencia libre.
Hasta que los Cowboys no tengan cerrado un acuerdo con Gallup, es improbable que dejen libre a Cooper.