El marcador ya favorecía claramente a Philadelphia, 31-7, cuando jugadores de ambos equipos se fueron a las manos hacia el final del cuarto periodo
La frustración se apoderó de los San Francisco 49ers hacia el final de un Juego de Campeonato de la NFC que concluyó como una vapuleada a manos de los Philadelphia Eagles, cuando el tackle ofensivo de los Niners, Trent Williams, inició una pelea contra el back defensivo K’Von Wallace, ocasionando la expulsión de ambos jugadores del partido.
El incidente ocurrió en jugada de tercera y 9 que resultó en un acarreo de 6 yardas para Christian McCaffrey, quien fue frenado por Reed Blankenship y Zech McPhearson, backs defensivos de los Eagles. Un Williams frustrado tomó entonces por atrás a Wallace y lo lanzó al suelo.
De inmediato, jugadores de ambos equipos comenzaron a empujarse, incluyendo a Ndamukong Suh y Milton Williams de los Eagles. El ala cerrada estelar de San Francisco, George Kittle, intentó separar y calmar a Trent Williams.
Jugadores y coaches de ambos equipos saltaron al campo desde las bancas.
Para el momento del incidente, con poco más de 4 minutos por jugar en el último cuarto, los Eagles ya estaban cómodamente arriba por 31-7, que terminó como el marcador final.
En la jugada subsecuente, los Eagles forzaron un balón suelto de Deebo Samuel, recuperado por Blankenship, que devolvió la posesión a Philadelphia. De ahí en adelante, los Eagles ya no perdieron la posesión del balón, agotando el tiempo restante en el reloj de juego para estampar su pasaporte al Super Bowl LVII.
Se trata del segundo viaje de los Eagles al Super Bowl en seis temporadas, luego de que conquistaran la edición LII sobre los New England Patriots.
Mientras tanto, los Niners buscaban su segunda aparición en un Super Bowl en cuatro temporadas, luego de sucumbir en la edición LIV ante los Kansas City Chiefs.
Philadelphia es dirigido por el head coach de segundo año, Nick Sirianni.