El receptor abierto exigió su salida de San Francisco vía traspaso tras no recibir, aún, extensión contractual
SANTA CLARA -- Al tiempo que espera un muy ansiado día de cobro, el receptor abierto de los San Francisco 49ers, Brandon Aiyuk, ha intentado múltiples métodos para obligar a la franquicia a llegar a un acuerdo durante el actual receso de temporada. A lo largo de este tiempo, Aiyuk declinó pedir un canje. Hasta el martes.
Al tiempo que los Niners se preparan para reportar al campamento de entrenamiento en la semana entrante, Aiyuk oficialmente solicitó un canje, confirmaron fuentes a ESPN. Las partes han estado discutiendo los parámetros de una extensión de alto valor desde marzo, pero todavía no encuentran un punto medio mientras otros receptores abiertos de la liga han cobrado, elevando el precio de Aiyuk en el proceso.
A Aiyuk, de 26 años de edad, le resta un año de contrato a su acuerdo de novato, la opción de quinto año que le deberá pagar 14.124 millones de dólares para esta temporada. Busca una extensión que duplique, aproximadamente, ese valor en términos de salario promedio anual.
Los Niners, mientras tanto, han planeado desde hace tiempo retener a Aiyuk con la intención de que se mantenga como uno de los puntos focales de la franquicia.
En caso de que Aiyuk siga para la próxima temporada, los 49ers regresarían con los 11 titulares ofensivos de un grupo que culminó primero en puntos ofensivos por encuentro (28.4), eficiencia ofensiva (76.02) y puntos ofensivos esperados añadidos (148.06), y segundos en yardas por partido (398.4) en el 2023.
Aiyuk, por supuesto, desempeñó un rol crítico en esa producción, liderando a San Francisco en recepciones por segundo año en fila, consiguiendo una marca personal en yardas en recepciones (1,342), y encabezando a la liga en yardas por pase dirigido (12.9), al tiempo que terminó segundo en yardas por atrapada (17.9).
No existe fecha límite oficial para que los Niners y Aiyuk logren un pacto, pero con los campamentos de entrenamiento y la temporada regular aproximándose, hay al menos unos términos no oficiales para que se logre algún convenio.
Aquí están todas las opciones para el club y para el jugador.
¿Por qué solicita Aiyuk un canje, y estarían dispuestos los 49ers a considerarlo?
Para decirlo de un modo simple, Aiyuk desea ser recompensado como uno de los mejores receptores abiertos de la NFL. Solo en este receso de campaña, estelares de la talla de Justin Jefferson de los Minnesota Vikings, DeVonta Smith y A.J. Brown de los Philadelphia Eagles, Jaylen Waddle de los Miami Dolphins y Amon-Ra St. Brown de los Detroit Lions firmaron lucrativas extensiones contractuales. St. Brown, Brown y Jefferson pactaron convenios que promedian, al menos, 30 millones de dólares por campaña, cada uno.
Aunque esos acuerdos han sido firmados, Aiyuk ha estado esperando impacientemente el suyo. Para ello, ha empleado las redes sociales para externar su insatisfacción con el equipo, a sea en forma de emoji o videos de Instagram o TikTok entre él y el quarterback de los Washington Commanders, Jayden Daniels, en el que dice que los Niners ya no lo quieren.
Aiyuk también ha admitido que ha usado esos medios como modo de presionar a los Niners a pactar tan pronto como sea posible. También ha dicho, oficialmente, que espera estar con el equipo en el 2024, e incluso envió un mensaje de texto al head coach Kyle Shanahan y al gerente general John Lynch en la noche del draft para elogiar la selección del receptor abierto de primera ronda, Ricky Pearsall.
En medio de todo eso, los Niners se han mantenido firmes de que no tienen deseos de canjear a Aiyuk. La petición de canje del martes no hizo nada para cambiar su idea respecto a ello, tampoco, No solamente consideran los Niners a Aiyuk como un jugador base, sino también tienen la mira puesta en tratar de dar el último paso y ganar un Super Bowl este año.
Traspasar a Aiyuk en julio por selecciones de draft del 2025 no ayudará a esa misión, y tendría poco sentido. Por esa razón, los Niners se han rehusado a entablar conversaciones de canje con organizaciones preguntando por Aiyuk. Quizás, un equipo ofreciendo a un jugador capaz de marcar diferencias a cambio de Aiyuk modifique la postura de los 49ers, pero tales intercambios son raros en la NFL, y todavía más improbables en esta época del año.
¿Podrían los Niners todavía retener a Aiyuk?
Absolutamente. Por extraño que parezca, dada la petición de traspaso, parece ser todavía el resultado más plausible. En los últimos cinco años, los 49ers han tenido a dos jugadores solicitando ser negociados, solo para quedarse con el club después de eso.
El receptor abierto Deebo Samuel Sr. pidió su salida vía canje en la primavera del 2022, solo para firmar un acuerdo de tres años por hasta 73.5 millones de dólares a finales de julio. El pateador Robbie Gould pidió emigrar en abril del 2019, y también pacto en julio de aquel año para quedarse.
Es más, los 49ers tienen un historial todavía más largo de terminar los acuerdos hacia el final del verano. Aunque en este caso, esperar haya hecho dispararse el precio de Aiyuk, es simplemente el modo en que los Niners han preferido hacer negocios.
Como evidencia, aquí están las fechas en que otros jugadores estelares acordaron sus extensiones de contrato en años recientes:
• Ala cerrada George Kittle, agosto 13, 2020
• Linebacker Fred Warner, julio 21, 2021
• Receptor abierto Deebo Samuel Sr., julio 31, 2022
• Ala defensiva Nick Bosa, septiembre 6, 2023
El convenio de Bosa tardó hasta justo el inicio de la temporada regular. Si Aiyuk no ha sido firmado para entonces, entonces quizás sí cambie la conversación.
¿Qué sigue para Aiyuk?
Los Niners reportan al campamento de entrenamiento el martes próximo, con la primera actividad sobre el campo agendada par el día siguiente. Aiyuk podría mantenerse alejado, como sucedió con el minicampamento obligatorio de junio. En caso de hacerlo estaría sujeto a multas por hasta 50,000 dólares por práctica perdida durante el campamento. Pero, a diferencia de los más de 101,000 dólares en multas que acumuló por perderse el minicampamento, a Aiyuk se le pueden perdonar las multas del campamento de entrenamiento dado que se trata de su contrato de novato. Los Niners hicieron justamente eso por Bosa cuando renovó en septiembre del año pasado.
Aiyuk también podría seguir los pasos de Samuel y "desactivarse", mientras sus representantes trabajan para llegar a un acuerdo. Eso significaría que Aiyuk reportaría al campamento y participaría en las reuniones, pero no realizaría ninguna actividad durante las prácticas. Samuel hizo sobre todo trabajo de acondicionamiento en uno de los campos laterales hasta que se completó su convenio.
Si Aiyuk no recibe un nuevo contrato y si no es canjeado, podría jugar la siguiente campaña antes de potencialmente convertirse en agente libre sin restricciones para el 2025. Pero, los Niners todavía tendrían la última palabra, dado que Aiyuk se convertiría en candidato ideal para la etiqueta de jugador franquicia, un escenario que ambas partes preferirían evitar.
¿Qué significa todo eso para el futuro de Samuel con los 49ers?
Todas las señales apuntan a Samuel jugando la próxima temporada bajo su contrato actual, y luego dejando a los Niners decidir su futuro en el próximo receso de campaña. Eso podría cambiar si San Francisco sufre en la primera parte el año, y recibe buenas ofertas de canje antes de la fecha límite. Si no llega a eso, los 49ers saben que son un mejor equipo en el 2024 si tienen a Samuel y Aiyuk jugando para ellos.
Samuel ya no tiene más dinero garantizado en su pacto después de esta temporada, aunque habría un cargo por dinero muerto de 15.1 millones de dólares en caso de que los Niners lo corten o traspasen antes del 1° de junio del 2025. Esa movida ahorraría también 9.1 millones de dólares contra el tope salarial del 2025.
Como Aiyuk, Samuel escuchó bastantes rumores de canje en torno a su nombre alrededor del draft de este año, aunque no pareció demasiado preocupado por ello ni por la especulación respecto a su futuro después de la próxima temporada.
"Al final del día, el contrato fue firmado", notó Samuel en junio. "Sé lo que firmé y solo estamos enfocados en este año".
Si los Niners no pueden retener a Aiyuk, las posibilidades de amarrar a Samuel se incrementan, aunque también estaría en la fila esperando una extensión en el siguiente receso de campaña para disminuir su impacto proyectado contra el tope salarial del 2025 de 24.2 millones de dólares.
¿Existe algún escenario donde tanto Samuel como Aiyuk se mantengan con los Niners en el 2025?
Nada es imposible, pero también requeriría una extensión para Samuel, algo que podría ser difícil porque los Niners tienen tantos otros jugadores clave en espera de nuevos acuerdos, incluyendo uno que puede alterar dramáticamente su panorama de tope salarial por los años que vienen.
Ninguna negociación futura será más importante que la que viene posiblemente en el próximo receso de campaña para Brock Purdy. El quarterback viene de un 2023 en el que impuso récord de franquicia en yardas por pase (4,280), se convirtió en el primer pasador de los Niners desde Jeff Garcia en el 2001 en tirar para al menos 30 touchdowns, y se ganó su primera invitación al Pro Bowl.
Si Purdy puede armarse otra campaña similar a esa, o algo mejor, entonces estará posicionado para exigir un contrato que le pague más de 45 millones de dólares anuales. Representaría uno de los mayores aumentos en la historia de la NFL, después de que Purdy cobre un salario base de 985,000 dólares en el 2024. Los 49ers ya se han comenzado a preparar para el día de pago para Purdy, lo que casi con seguridad será prioridad por encima de cualquier otro negocio en el 2025.