Lamb dejó caer el balón tres veces, incluyendo dos en el último cuarto, lo que impidió que Cowboys dieran la sorpresa ante Eagles.

FILADELFIA -- El receptor abierto del Pro Bowl, CeeDee Lamb, cargó con la culpa de la derrota de los Dallas Cowboys por 24-20 ante los Philadelphia Eagles en el inicio de la temporada el jueves por la noche en el Lincoln Financial Field.

"¡Qué terrible!", dijo en el vestuario. "Sinceramente, no puedo culpar a nadie más".

Lamb dejó caer el balón tres veces, incluyendo dos en el último cuarto, lo que impidió que los Cowboys dieran la sorpresa la noche en que los Eagles celebraron el campeonato del Super Bowl de la temporada pasada.

Durante el campamento de entrenamiento, Lamb, quien dejó caer el balón siete veces la temporada pasada, indicó que uno de sus objetivos para 2025 era terminar la temporada sin dejar caer el balón. El primero llegó en el segundo cuarto e impidió que los Cowboys anotaran un touchdown en tres posesiones consecutivas al comienzo del partido, obligándolos a conformarse con un gol de campo de Brandon Aubrey.

"No fueron solo esas jugadas", afirmó el mariscal de campo Dak Prescott. “Hay pases que quiero recuperar. Pero es el primer partido, y él es un tipo que hace esas jugadas. Las va a hacer. No voy a desanimarlo. No voy a perder la confianza bajo ningún concepto. Y las hará”.

Prescott no dudó en recurrir a Lamb. Tenía 13 pases en su dirección, la mayor cantidad del partido. Y cuando el juego estaba en juego, Prescott miró hacia él.

Con 2:40 por jugar, Lamb dejó caer el balón más crucial, el tercero, mientras los Cowboys buscaban la anotación de la ventaja. Prescott colocó perfectamente un pase profundo en la trayectoria de Lamb, pero el balón rebotó en sus manos sin hacerle daño, dejando a Lamb en shock.

Fue su primer partido con tres pases dejados caer desde la Semana 13 del año pasado contra los New York Giants.

De haber hecho esa recepción, los Cowboys habrían tenido el balón dentro de la yarda 20 de los Eagles y no habrían sido detenidos en la zona roja en sus dos intentos de la primera mitad. "Asumo toda la responsabilidad y todo lo que conlleva", reconoció Lamb. "Como jugador, he rezado por momentos como ese, por que el balón viniera hacia mí y por no hacerlo, eso duele un poco".

Tras una parada defensiva, los Cowboys se enfrentaron a cuarta y tres desde su yarda 45 tras la pausa de los dos minutos. Alineándose en la ranura, Lamb se aprovechó de Cooper DeJean con un pase profundo que quedó fuera de su alcance mientras se lanzaba. Aunque no se considera un pase dejado caer, es una recepción que Lamb, tres veces Pro Bowl y en el segundo año de una extensión que promedia $34 millones por temporada, espera realizar.

"No me preocupa CeeDee Lamb", aseguró el entrenador Brian Schottenheimer. "CeeDee estará bien. Es un gran jugador. De nuevo, esta fue una derrota de equipo, y somos responsables de ello".

Lamb terminó con siete recepciones para 110 yardas, la mayor cantidad del partido. Fue el 22.º partido de su carrera con al menos 100 yardas de recepción, empatando al miembro del Salón de la Fama Bob Hayes en el tercer puesto en la historia de la franquicia. Solo el miembro del Salón de la Fama Michael Irvin (47) y Tony Hill (26) tienen más en la historia del equipo como receptores. Fue su tercer partido de 100 yardas de su carrera contra los Eagles.

Pero fueron las tres yardas que se le escaparon las que más le molestaron a Lamb, y no iba a usar la falta de acción de pretemporada como un factor.

"Eso no tiene nada que ver con lo que está pasando ahora mismo", finalizó. "Necesito atrapar el maldito balón".