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Marlon Mack de los Colts es el Coloso de la Ronda de Comodines

En cuanto toca a números en crudo, la Ronda de Comodines no dejó mucho de dónde elegir para nuestra lista semanal. Sin embargo, sí disfrutamos de partidos que en general fueron competitivos hasta el final, y eso habla de la paridad de la mejor liga del mundo.

Aquí van nuestros elegidos como los mejores desempeños individuales de la primera ronda de la actual postemporada.

MARLON MACK, RB, INDIANAPOLIS COLTS

Probablemente, el resultado más sorpresivo de la jornada fue la victoria de los Colts en casa de los Houston Texans. Desde luego, se trata de un duelo divisional entre rivales que dividieron triunfos en la temporada regular. Sin embargo, fue el único duelo que no se decidió por seis puntos o menos en la jornada, en los instantes finales.

En otras palabras, Indy fue el único triunfador de la Ronda de Comodines que ganó con cierta comodidad, dentro de lo que cabe emplear esa frase en un partido de playoffs de la NFL.

Y en una campaña donde los quarterbacks nuevamente se hicieron con los titulares y los reflectores a lo largo de la campaña, nuevamente regresamos al librito para determinar a los triunfadores, al menos en este fin de semana: ataque terrestre y un sólido desempeño defensivo pesaron más que los pasadores.

Los Colts no fueron la excepción con Mack, quien acarreó el ovoide 24 veces para 148 yardas y un touchdown en su primera aparición de postemporada.

Desde luego, un triunfo como el de Indy no se reduce únicamente a lo hecho por un jugador. El quarterback Andrew Luck demostró que está de regreso, la defensiva puso de su parte, y la línea ofensiva abrió suficientes huecos con suficiente frecuencia para que Mack pudiera desplegar lo suyo.

Por primera vez en no sé cuántos años, los Colts no son un equipo unidimensional a la ofensiva, y eso los convierte en un peligro para unos Kansas City Chiefs que, a la postre, parecen haber perdido esa dualidad ofensiva luego de la baja de Kareem Hunt en la temporada regular. Sin duda, nos espera un choque altamente atractivo en la Ronda Divisional.

MENCIONES HONORÍFICAS

Amari Cooper, WR, Dallas Cowboys: Era crucial para Dallas contar con un buen desempeño de Cooper, después de perder al arranque del partido a Allen Hurns por una escandalosa fractura en el tobillo. Lo sabían los Cowboys, y lo sabían los Seahawks. Aun así, Seattle no pudo hacer mucho para frenarlo. El mejor socio de Dak Prescott en la noche, Cooper se despachó con siete recepciones para 106 yardas en nueve pases dirigidos hacia él, brindando a Prescott no solamente un objetivo grande capaz de quedarse con el ovoide en tráfico, sino también la posibilidad de sumar yardas después de la recepción.

Ezekiel Elliott, RB, Cowboys: A veces, es absolutamente desconcertante lo simple que parece ser la fórmula ofensiva en Dallas. Cuando los Cowboys alimentan a Elliott, usualmente les irá bien. Así sucedió el sábado por la noche frente a los Seahawks, cuando Elliott corrió el ovoide en 26 ocasiones para 137 yardas --5.3 yardas por acarreo-- y un touchdown. Además, contribuyó con 32 yardas adicionales en cuatro recepciones, cruciales después de la pérdida de Hurns en el encuentro.

Melvin Ingram, LB, Los Angeles Chargers: Los Bolts hicieron un trabajo defensivo espectacular frente al quarterback Lamar Jackson, quitándole buena parte del brillo que había creado durante la segunda mitad de la campaña al frente de la ofensiva de los Baltimore Ravens. Los angelinos impusieron marca de capturas en contra de un pasador novato con siete, dos de las cuales fueron rubricadas por Ingram, quien además se erigió como el héroe final del partido al recuperar el balón suelto que selló la victoria de los Chargers en los instantes finales.

Kenny Moore, S, Colts: Hablar de los Colts y de una actuación estelar defensiva parece algo loco, especialmente considerando los nombres que tiene la unidad defensiva del equipo contrincante: los Jadeveon Clowney, J.J. Watt, Benardrick McKinneys de los Texans. Sin embargo, Indy consiguió frenar a la ofensiva de Houston a lo largo de casi todo el partido, permitiendo apenas un touchdown, y limitando al estelar de los Texans, DeAndre Hopkins, a solamente cinco recepciones para 37 yardas. Parte de ese notable esfuerzo fue lo aportado por Moore, quien interceptó un pase a Deshaun Watson y registrara también captura de mariscal de campo, además de sumar seis derribos y dos pases defendidos.

Mitchell Trubisky, QB, Chicago Bears: Está claro que para aparecer en este espacio después de una derrota, se requiere dar un pequeño extra. Ese extra lo dio esta noche Trubisky, siendo el único mariscal de campo en superar la marca de las 300 yardas en una campaña en la que, nuevamente, nos dijeron hasta el cansancio que "en esta liga se gana pasando". Trubisky hizo un buen trabajo con sus lecturas, completando 26 de 43 intentos de pase para 303 yardas y un touchdown sin intercepciones ante los Philadelphia Eagles, aunque, desafortunadamente para su causa, resultó un esfuerzo insuficiente.