CHARLOTTE -- El corredor de los Carolina Panthers, Elijah Holyfield, tenía 14 años de edad cuando entró a un cuadrilátero de boxeo frente a un chico de 16 años altamente ranqueado. Fue la oportunidad de hacerse un nombre propio en un mundo donde su padre alcanzó la grandeza, quizás abrirse un camino personal en el deporte.
Evander Holyfield, un cuatro veces campeón de peso completo y único boxeador en detentar títulos indiscutidos en dos pesos diferentes, tenía confianza de que su hijo estaba a la altura del reto.
"Recuerdo decir, 'Él puede con ese tipo. Solo no le digan a su madre, porque sé que ella va a pensar en toda la pelea que tiene este chico'", recordó el mayor de los Holyfield la semana pasada durante el torneo de celebridades de kickball de Cam Newton, que se llevó a cabo mientras Elijah participaba en un minicampamento para novatos con los Panthers.
"Era rijoso y pegaba muy duro".
Elijah también pegaba duro. Estaba resistiendo bien en la pelea, pero a diferencia de su padre, tenía el hábito de dejar la cabeza en alto, exponiendo el rostro a los golpes en lugar de la frente. Eso llevó a un sangrado de nariz y una descalificación.
Elijah nunca regresó al cuadrilátero competitivamente.
"Era, 'No quiero que me peguen tanto'", recuerda Elijah. "Así que simplemente me quedé con el fútbol americano, y ha funcionado para mí".
Sea o no que Elijah se convierta en algo genuino en la NFL del modo en que su padre lo hizo en el boxeo está por verse. Los Panthers lo firmaron como novato no reclutado procedente de Georgia luego de que un tiempo lento en las 40 yardas de 4.78 segundos en el Combinado de Talento de la NFL lastimara sus bonos de draft.
Su status de jugador no reclutado significa que tiene mucho por probar en una cerrada competencia por servir como reserva de Christian McCaffrey, quien la temporada pasada se quedó apenas corto de convertirse en el tercer corredor en la historia de la NFL en sumar 1,000 yardas terrestres y 1,000 por aire en la misma campaña.
Entrela competencia de Holyfield está el recluta de quinta ronda Jordan Scarlett de Florida, y el recluta de quinta vuelta del 2015, Cameron Artis-Payne, además de Elijah Hood y Reggie Bonnafon.
Nuevamente, Evander cree que su hijo está a la altura del reto.
"Es un poco decepcionante que no fue reclutado", admitió. "El hecho es, es parte de la vida. Si eres suficientemente rápido y anotas touchdowns, ¿qué más da lo que cronometras [en las 40 yardas]? Si solamente importara lo rápido que eres, entonces tendrían solamente estrellas de pista en la NFL".
¿Mala decisión?
De haber dependido de Evander, su hijo se hubiera quedado en Georgia un año más.
"Siento que fue una mala decisión", confesó. "Nadie me informó de nada. Lo leí en el diario... Tenías a muchas personas diciendo, 'Tú no entiendes'. Dije, 'No es que no entienda. Si empiezas algo, lo terminas'.
"Pero ya se había hecho, así que más vale seguir adelante y apuntar a lo mejor".
En Georgia, Elijah compartió tiempo con el junior en ascenso D'Andre Swift, y el backfield hubiera sido más apretado este año para los Bulldogs con el surgimiento de James Cook y Zamir White regresando de lesión.
"Simplemente intento descifrar las opciones para mí, dónde podría tener mayor éxito", dijo Elijah de su proceso de decisión. "¿Hubiera tenido una mejor campaña y elevado mi nivel, o hubiera sido un año desperdiciado?".
Al final decidió no arriesgar una lesión potencial. Corrió para 1,018 yardas y siete touchdowns la temporada pasada, y promedió 6.4 yardas por acarreo, creyendo que había demostrado estar listo para la NFL.
"Trabajo muy duro y soy un corredor muy físico que cuenta con la velocidad para hacer que fallen las personas al mismo tiempo", subrayó Elijah. "Así que siento que aporto un buen elemento a este equipo".
Los Panthers creen que lo visto en sus cintas compensa su tiempo en las 40 yardas.
"Realmente ves explosividad entre los tackles; ves su habilidad de correr entre las costuras", dijo el head coach de los Panthers, Ron Rivera. "Sé que no tuvo un buen tiempo en las 40, pero cuando pones el video... fue bastante impresionante.
"No creo que [el tiempo en las 40 yardas] realmente hable de quién es como jugador de fútbol americano. Es una de esas cosas que no sale la suma".
Finaliza lo que empiezas
Evander cedió el fútbol americano en favor del boxeo aproximadamente a la misma edad que Elijah cedió el boxeo por el fútbol americano.
Era su décimo año en la ahora desaparecida Fulton High School en Atlanta. Evander, entonces de alrededor de 110 libras, dijo a su coach que deseaba jugar como corredor y linebacker.
El coach le dio a elegir, ofensiva o defensiva.
"Dije, 'Si un tipo me golpea, voy a golpearlo de regreso', así que opté por la defensiva", relató Evander. "Deseaba jugar como linebacker. Dijo que yo era muy pequeño, así que me pusieron en una esquina. No le gustó porque estaba lastimando a los chicos buenos.
"Dijo que no estaba jugando bien la posición. Le respondí, 'Yo no pedí jugar esa posición'. Me levantó de las hombreras y me puso en la banca. No tuve oportunidad".
Pero Evander no se rindió. Su madre dijo, Regresa, debes terminar".
"Ella dijo, 'Hijo, cuando boxeas, eres el último que tomas una decisión. Los coaches toman una decisión en el fútbol americano sobre quién es el mejor'", rememoró Evander. "Yo era Holyfield, entonces, pero nadie sabía quién era.
"Así que regresé".
Esa mentalidad es la que siempre trató de instalar Evander en Elijah, quien antes de llegar a la preparatoria se salió de casa de su madre y padrastro para mudarse a la mansión de 44,234 pies cuadrados de su padre, que ahora es propiedad del rapero Rick Ross.
Elijah y Evander se levantaban temprano para correr y entrenar por la mañana con un preparador personal. Pasaron mucho tiempo hablando sobre lo que se necesitó para que Evander tuviera éxito en el boxeo, algo que Elijah espera aportar en el fútbol americano.
"Simplemente la mentalidad", dijo Elijah, quien consiguió su cinta negra en taekwondo, trabajando con el linebacker cinco veces elegido al Pro Bowl, Greg Lloyd. "Debes tener una mentalidad muy fuerte para entrenar en el boxeo y también las peleas, simplemente ganar en el uno a uno.
"Intento traer eso al fútbol americano siempre que hay un uno a uno".
Simplemente, papá
Creciendo, Elijah nunca vio a su padre como la leyenda de boxeo que otros lo ven, incluyendo la muchedumbre de cazadores de autógrafos en el torneo de kickball de Newton.
"Simplemente, lo veía como papá", dijo. "Nunca lo vi como esta figura inmensa hasta ahora. Siempre me preguntan sobre él. Me doy cuenta de lo grande que fue".
Un duro trabajador es lo que vio Elijah en el hombre a quienes muchos recuerdan por haber perdido parte de una oreja en el 1997 durante una pelea en contra de Mike Tyson.
"Si trabajas más que los demás, siempre terminas arriba", explica Elijah de las lecciones de vida de su padre. "Es lo que hizo. Es lo que planeo hacer".
Evander comparó el reto de su hijo con el que enfrentó tras ganar una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de 1984, cuando decidió hacerse profesional.
"Es un inicio nuevo", expresó. "Debes probarte de nuevo. Jugaste en el colegial. Jugaste bien. Ahora eso está atrás de ti. Debes percatarte de que hay que dar otro paso".
Irse sin ser reclutado ha dado a Elijah mayor motivación "para demostrar lo que puedo hacer".
"Simplemente traté de hallar mi propio camino", dijo Elijah. "Y lo encontré en el fútbol americano".