Los Houston Texans llegarán a la temporada 2019 a la búsqueda de su cuarto título de la División Sur de la Conferencia Americana en cinco años.
El problema es que han sido incapaces de trascender en postemporada con muy buenos rosters de ambos lados del balón, aunque en principio carecían de quarterback.
Ahora que por fin lo encontraron en Deshaun Watson, parece que la división luce más complicada con el resurgimiento de los Indianapolis Colts.
Y es probable que para el entrenador Bill O'Brien, quien arrancará su sexta campaña con los Texans, la cuenta regresiva en su puesto comenzó, salvo que pueda llevarlos al siguiente nivel. Para lograrlo hay dos áreas que deberá mejorar de manera sustancial: la protección de Watson y la defensiva secundaria.
PROTEJAN AL QUARTERBACK
Watson sufrió 62 capturas la temporada anterior; la mayor cantidad en la NFL desde el 2006.
El quarterback de tercer año ha sido golpeado como pocos en su joven carrera profesional y la nueva gerencia general está consciente. Por eso invirtieron en agencia libre en el tackle ofensivo Matt Kalil, quien faltó por lesión la temporada anterior a los Carolina Panthers, y en selecciones de primera y segunda ronda del draft, con los tackles Tytus Howard y Max Scharping, de manera respectiva.
También dieron alargue contractual al tackle derecho Seantrel Henderson, quien regresa de una fractura de tobillo.
El único titular garantizado del año anterior para abrir en el 2019 es el centro Nick Martin, así que la competencia entre veteranos y novatos será buena para tratar de ayudar en la protección de Watson.
A pesar de las 62 capturas, Watson jugó todos los partidos en su campaña de regreso de la lesión de rodilla que sufrió en su año de novato.
Lanzó para 4,165 yardas con 26 touchdowns, además de 551 yardas corridas y otras cinco anotaciones.
Su principal aliado deberá ser, otra vez, DeAndre Hopkins, uno de los mejores receptores de la NFL, y prácticamente el único consistente en Houston.
Por tierra, Lamar Miller es un corredor más que decente para ayudar a mover el balón y darle descanso a la defensa.
REFUERZAN LA SECUNDARIA COMO POCOS
Los Texans tienen una defensa contra la carrera espectacular anclada por el ala defensiva J.J. Watt.
Junto al linebacker Whitney Mercilus --y el esperado regreso de Jadeveon Clowney, quien se halla en medio de una disputa contractual-- son feroces persiguiendo quarterbacks. Y a pesar de eso, su secundaria fue patética en el 2019.
Dejaron ir al profundo Tyrann Mathieu y al esquinero Kareem Jackson, para llevar a Tashaun Gipson, Bradley Roby y Briean Boddy-Calhoun.
En el draft eligieron para de esquineros más, Lonnie Johnson y Xavier Crawford, en segunda y sexta rondas.
PREDICCIÓN
Los Texans saben que para competir con el favorito Colts en su división tiene que defenderse del pase de Andrew Luck y tratar de moverle el balón a una defensa que terminó el 2018 más afilada que ninguna otra.
También tienen que proteger a Watson de la defensiva de los Jacksonville Jaguars que el año pasado se cayó pero tiene mucho talento.
Los Tennessee Titans van a mejorar de ambos lados del balón.
Pero Houston otra vez parece tener el talento para competir por ese Sur y llegar más lejos en playoffs.
Todo depende de que el entrenador O'Brien y su staff por fin den el paso adelante.
Houston se coronará en la división con 10 triunfos, pero y llegará sólo hasta la Ronda Divisional.