CHARLOTTE -- Veinticuatro horas después de que el nuevo head coach de los Washington Redskins, Ron Rivera, de deshiciera del esquinero de Pro Bowl, Josh Norman, de su plantilla, se deshizo de más de 1,000 artículos que acumuló a largo de nueve temporadas con los Carolina Panthers.
Esta vez, fue con fines caritativos.
Rivera y su esposa, Stephanie, celebraron una venta de garage el sábado en la Humane Society of Charlotte, con la totalidad de los 30,237 dólares recaudados dirigidos para un nuevo campus e instalaciones de investigación para una de sus caridades preferidas durante su tiempo en la 'Queen City'.
Aproximadamente 3,000 personas hicieron fila para tener la oportunidad de comprar algo, desde las incontables playeras que mandó a hacer Rivera con frases inspiradoras y slogans promocionales, hasta la parafernalia militar que adquirió mientras trabajaba con la USO of North Carolina, hasta los zapatos que portó en las laterales.
Jugadores y ex jugadores como Luke Kuechly, Greg Olsen y Cam Newton también contribuyeron con artículos para ayudar a la Humane Society alcanzar su meta de 15 millones de dólares requeridos para reparar lo que la vicepresidente de filantropía, Dona Stucker, describió como instalaciones "en estado desesperado ".
Incluso los perros de Rivera, un golden retriever llamado Tahoe y un mestizo llamado Sierra, adoptado en su refugio, contribuyeron a la venta con correas, collares, camas para perro e incluso una cuna para perro.
Fue reminiscente de la venta de garage anual que celebró por años el ex head coach de los Minnesota Vikings, Bud Grant.
"No me di cuenta de cuántas cosas teníamos que de verdad podían ayudar", dijo Stephanie Rivera, sosteniendo una correa de Sierra.
Tampoco Ron Rivera, quien admitió que fue duro decidir qué cosas retener y qué cosas ofrecer. Entre los artículos en venta hubo cosas de su primera victoria en el 2011, su primera victoria de playoffs en el 2014, y un triunfo en Londres de la pasada campaña.
"Es un poco una despedida, nuestra última oportunidad para de verdad dar las gracias una vez más", dijo Rivera.
Rivera fue despedido con cuatro partidos por jugar en la campaña del 2019. Se va con dos premios como Coach del Año, una marca de 76-63-1 que lo hace el coach más ganador en la historia de Carolina, y lo que él describió como "muchas cosas".
Aficionados comenzaron a formarse horas antes del mediodía, cuando comenzó el evento. Steve Osment y su familia manejaron cinco horas desde Richmond, Virginia, para llegar a la venta.
No se fueron decepcionados, comprando tres sombreros, un tobogán, una sudadera, una chaqueta, una cama para perro, una cama para gato, unos zapatos deportivos, unos zapatos de vestir, y un cinturón que Osment dijo estaba "necesitando desde el año pasado". "Siempre hemos amado a Ron'', dijo Osment. "Acabamos de adoptar a un perro de un refugio. Me gusta lo que está haciendo. Para todo lo que ha sido para la comunidad y para el equipo, lo amamos y siempre lo amaremos".
Rivera, de 58 años de edad, habló un poco de fútbol americano antes de que abrieran las rejas. Respecto a la baja de Norman, de 32 años de edad, quien también fue cortado bajo su mando en Carolina en el 2016, el coach dijo que se hizo como parte de un esfuerzo por rejuvenecer.
Respecto a si el quarterback Newton, rehabilitándose de una cirugía en el pie, seguirá con los Panthers en el 2020, Rivera señaló, "Simplemente sé que, un Cam sano, nunca apostaría en contra de él''.
Respecto al retiro del linebacker interno, Kuechly, a los 28 años de edad, el corte del ala cerrada de Pro Bowl, Olsen, y otros movimientos de plantilla del nuevo head coach de Carolina, Matt Rhule, Rivera dijo: "Es el cambio de era. Ahora es tiempo de que el nuevo régimen llegue y lo construyan a su manera''.
El enfoque de Rivera en este día fue recaudar fondos con una venta que se originó en una conversación entre Stephanie y Tammy Reid, esposa del head coach de los Kansas City Chiefs, Andy Reid, cuando trabajaban juntos para los Philadelphia Eagles, de 1999 al 2003.
"Tenían 13 años de cosas con los Eagles'', dijo Stephanie. "Ella no lo desechó. Consiguieron casi 30,000 dólares''.
Stucker, para empezar, agradece que haya surgido esa conversación.
"No teníamos idea de qué esperar", dijo ella. "Es un testamento al coach y a Stephanie y cuán amados son en esta comunidad, y cuánto serán extrañados".