Una historia de amor, identificación y títulos. Ricardo Gareca, de 65 años, tiene una relación muy especial con su querido Vélez Sarsfield. El reconocido Tigre se destacó como jugador y después festejó títulos con el club de Liniers en condición de entrenador.
Gareca, que nació el 10 de febrero de 1958 en el barrio de Mataderos, en Argentina, se formó en Boca Juniors, donde debutó en Primera División en 1978. Como delantero, vistió también los colores de Sarmiento de Junín, River Plate y América de Cali, hasta que se sumó a las filas de Vélez, club del que es hincha e ídolo. Y luego finalizó su carrera futbolística en Independiente, en su país.
Como futbolista, Gareca volvió a Argentina en 1989 para vestir la camiseta de su amado Fortín de Liniers, donde se convirtió en uno de sus máximos ídolos de la institución. Disputó 117 encuentros y metió 24 goles con la camiseta de Vélez.
El famoso Tigre, cultor del perfil bajo, sencillo y humilde, actuó con la Selección Argentina, pero no fue citado para dos Mundiales, en especial el de México 1986, ganado por el equipo conducido por Carlos Bilardo, pese a que convirtió el gol clave de la clasificación frente a Perú en las Eliminatorias. Muchos años más tarde, ya como DT, el seleccionado peruano volvió a cruzarse en su camino, ya que lo dirigió con mucho éxito y lo clasificó para un Mundial tras 36 años, con la participación en la Copa del Mundo de Rusia 2018,
Ya como entrenador, Gareca guió a Vélez entre 2009 y 2013. Allí ganó títulos y dejó una grata imagen, fortaleciendo el vínculo con los hinchas de la entidad velezana. Tuvo un ciclo exitoso e inolvidable de cinco años, con cuatro títulos, 254 partidos, 130 victorias y 368 goles a favor.
En 2009 fue contratado como técnico de Vélez Sarsfield. El plantel completó una excelente campaña al ganar el Torneo Clausura 2009, con triunfo en la última fecha al vencer 1-0 a Huracán en el Estadio José Amalfitani.
En 2011, protagonizó el campeonato local y la Copa Libertadores, en la cual alcanzó las semifinales del torneo continental después de 17 años y conquistó el Clausura, que tenía como puntero al Fortín desde la décima fecha. Otra victoria sobre el Globo, esa vez de visitante y por 2:0, le permitió consagrarse campeón.
A fines de 2012, luego de vencer a Unión de Santa Fe por 2-0, obtuvo el Torneo Inicial, su tercer título como entrenador de Vélez, en esa ocasión a falta de una fecha para finalizar el campeonato. Y también celebró el Campeonato 2012-13, siendo campeón del Inicial al vencer 1-0 en la final a Newell's, dueño del Torneo Final. Por eso, dejó una huella tremenda en los simpatizantes del Fortín.
Cuando dejó el cargo en Vélez, habló en una entrevista con radio La Red: "Cada año sentía más presión. Era como que si no peleábamos algo o no conseguíamos algo, o el equipo no estaba a la altura todo era preocupante. En cambio, cuando hay un cambio todo empieza de cero".
"Son decisiones difíciles porque son muchos años, me fui a pensar un poco y creo que era lo mejor para Vélez, porque han pasado muchos años. Sentís que defraudás a la gente o que tenés que ganar todo, porque si no la gente está descontenta, y por eso yo preferí hablar con Christian (Bassedas, el manager) y los dirigentes y decidí retirarme", agregó.