Maxi Rodríguez es sinónimo de Newell’s. El club de Parque Independencia es el lugar en el que se formó como futbolista, al que decidió volver -interrumpiendo una exitosa carrera en Europa- para darle sus mejores años de jugador y donde jugó hasta los casi 41 años siendo siempre figura del equipo. El lugar en el que será homenajeado, este sábado 24 de junio, en un partido que contará con la presencia de grandes figuras de la institución rojinegra y de todo el fútbol argentino y con transmisión exclusiva de Star+.
El debut fue el 14 de noviembre de 1999, con 18 años, en el Coloso Marcelo Bielsa. Por la 14ª fecha del Torneo Apertura, Newell’s recibía a Unión de Santa Fe. La Lepra no venía bien, 17º entre los 20 equipos que entonces jugaban en Primera División.
A los 22 minutos del segundo tiempo y con el partido 0 a 0, el director técnico Andrés Rebottaro hizo un cambio ofensivo, sacó al lateral derecho Fabricio Fuentes y mandó a la cancha a Maxi Rodríguez, con el número 26. A la Fiera le bastó un minuto para ser importante. Eso tardó en dar la asistencia para que Juan Pablo Vojvoda pusiera el 1 a 0. El partido terminó 1 a 1 y Maxi tuvo una chance de convertir después de una combinación con Paulo Rosales y Damián Manso, pero se la sacó el Flaco Oscar Passet.
El primer adiós se dio curiosamente contra el mismo rival que su debut en Primera División. Newell’s, dirigido técnicamente por Julio Zamora, perdió en el Parque Independencia 2 a 0 contra Unión de Santa Fe, por la 16ª fecha del Torneo Clausura 2002, el 28 de abril de ese año. En la cancha estuvo Leo Ponzio, compañero suyo en Newell’s y en el Sub-20 que había ganado el Mundial en 2001.
El 15 de mayo, Maxi fue presentado como refuerzo del Espanyol de Barcelona, que pagó 5 millones de euros por el pase, aunque la transferencia recién se formalizó 40 días más tarde por una traba judicial. El contrato firmado con los catalanes fue por cuatro años, con una cláusula de rescisión de 24 millones de euros.
El gran regreso fue en 2012. Maxi Rodríguez cumplía el sueño de jugar en el fútbol inglés, venía de ganar la Copa de la Liga con el Liverpool y le quedaba un año más de contrato. Además, el nuevo DT de los Rojos, el irlandés Brendan Rodgers, había pedido expresamente que se quedara porque lo consideraba fundamental en su esquema.
Pero otras razones pesaron y el 13 de julio de 2012, Rodríguez anunció en su cuenta de Twitter que estaba “feliz de ser nuevamente jugador de Newell’s”, a los 31 años, en plenitud. Hubo un motivo familiar para pegar la vuelta. Maxi acababa de ser padre por segunda vez y quería que sus hijas Alma y Aitana crecieran en la Argentina. Pero además pesó la pasión: Newell’s iba a arrancar el torneo Inicial 2012 último en la tabla de promedios.
El 4 de agosto de 2012, por la primera fecha del Inicial, Maxi volvió a ponerse la camiseta de Newell’s, en un 0 a 0 contra Independiente en Rosario. En el equipo dirigido por el Tata Martino estaban, entre otros, Pablo Pérez y el arquero Nahuel Guzmán. Era el comienzo de un ciclo que terminaría de la mejor manera.
Hasta que llegó la consagración: el 19 de junio de 2013, a casi 14 años de su debut con la casaca rojinegra, Maxi Rodríguez por fin fue campeón con Newell’s. El 16 de junio, un 3 a 0 de visitante sobre Rafaela, una fecha antes de que terminara el torneo Final, dejó a un paso de la consagración al equipo de Martino que esa tarde formó con Guzmán; Cáceres, Vergini, Heinze, Casco; Pablo Pérez, Bernardi, Figueroa, Maxi; Tonso y Scocco. Tres días después, Lanús, que marchaba segundo, perdió contra Estudiantes y Newell’s se aseguró así el título.
“Tanto los que volvimos de afuera como los que estaban acá lo único que queríamos era sacar a Newell's del descenso y terminamos dando la vuelta olímpica”, dijo Maxi. Tras la vuelta olímpica lo sondeó Boca pero él no se quiso ir de Newell’s
Una vuelta más. En julio de 2017, diferencias con la dirigencia de Newell’s hicieron que tomara la decisión de irse. Tenía 36 años y pareció el punto final de la trayectoria en el club de sus amores. Pasó a Peñarol de Montevideo donde jugó un año y medio, ganó cinco títulos y fue idolatrado. Pero el 29 de enero de 2019 comenzó el último acto con la camiseta negra y roja. Maxi volvió en el Coloso, contra Boca y con un golazo para que Newell’s empatara 1 a 1.
La despedida fue el 6 de diciembre de 2021, cuando Newell’s recibió a Banfield por la penúltima fecha del torneo de la Liga Profesional. Ninguno de los dos se jugaba nada. Lo único importante en el Parque de la Independencia ocurrió a los 11 minutos del segundo tiempo: el capitán de 40 años, que había entrado al campo de juego acompañado por sus hijas, dejó la cancha reemplazado por Nazareno Funez. Salió tapándose el rostro para que no lo vieran llorar, con la camiseta que llevaba su foto en el pecho, ovacionado. Empezaba el homenaje de la hinchada leprosa que se concretará este sábado 24 de junio.