Edwin Cardona, futbolista del América de Cali, contó que vivió un calvario durante su etapa en Racing, en la que sufrió de depresión y su hijo "lo salvó de una tragedia".
"Al final nosotros somos seres humanos. Yo llegaba a mi casa y tomaba pastillas para poder dormir, sufría depresión", indicó el nacido en Medellín hace 30 años en diálogo con DirecTV Sports Colombia.
Y contó más detalles del duro momento personal que atravesó en su estadía en Argentina: "Tenía que estar 24 horas con una persona que me acompañara a entrenar, que estuviera en el carro y durmiera conmigo, porque llegué a una época en la que me di cuenta de que solo tenía alrededor a mi familia, a mi hijo, que tenía ocho años, porque mi esposa no podía viajar por un tema de salud".
"Dios a uno le pone esas personas... Mi hijo (Emiliano) fue la única persona que me salvó de alguna tragedia que hubiera hecho yo en lo personal", afirmó.
Además, el ex Selección Colombia señaló que "nadie le preguntaba a él por qué no jugaba, por qué no lo metían o por qué solo jugaba cinco minutos", en tanto destacó que él quería jugar, pero "sabía que tenía muchas cosas detrás".
"También viví cosas que no se las deseo que viva nadie, ni en lo familiar ni en lo futbolístico. El día a día fue algo complicado tanto para mí como para mi familia. Creo que familiarmente fue algo más duro para las personas que tenía a mi alrededor", completó quien disputó cuatro Copas América.
A pesar del crudo relato, Cardona dijo estar "agradecido" con la gente de Racing (pagó 3.3 millones de dólares por el 50% de su pase), su staff, el club y el presidente, ya que "se comportaron muy bien con él".
Y finalizó deseando una revancha personal en la Academia, que este sábado disputará el clásico de Avellaneda, a pesar de su presente en el conjunto escarlata: "No sé si Dios me dará la oportunidad de tener alguna revancha. La aceptaría y me gustaría también, porque siento que hay una deuda con la gente de Racing".