Abel Hernández, delantero que se desvinculó de Peñarol, reconoció que recibió un llamado del técnico de Rosario Central, Miguel Ángel Russo, y que aguarda la oferta económica del club para resolver su futuro.
“Tuve una charla con Miguel Russo, técnico de Rosario, y fue muy buena. Argentina me seduce por estar cerca de Uruguay, tener a la familia cerca. Además, el fútbol argentino es lindo, dinámico, y Rosario Central se puede adaptar a mi juego. Ahora hay que ver cuándo y analizar cuando los dirigentes pongan la oferta arriba de la mesa”, dijo el jugador en el programa "100% Deporte" de radio Sport 890.
Abel, que terminó como el quinto goleador de la temporada con 12 goles, seis por detrás del máximo artillero que fue Juan Ignacio Ramírez, fue el jugador de mejor promedio al anotar un gol cada 86 minutos.
Hernández, de 33 años, tiene un largo recorrido en el fútbol que lo llevó a jugar en Italia, Inglaterra, Rusia, Brasil, México y Qatar. Fue parte del proceso de Oscar Tabárez en la Selección de Uruguay, pero debió convivir a la sombra de los máximos goleadores de la historia de la Celeste: Luis Suárez, Edinson Cavani y Diego Forlán.
El delantero no pudo cerrar bien la temporada debido a un desgarro que generó controversias con la sanidad de Peñarol. Abel dijo que los médicos del club le dijeron que estaba recuperado cuando, su médico particular, entendía lo contrario. El resultado fue que se volvió a resentir y le costó volver a la actividad. Debido a ello, el delantero pensó hasta en retirarse de la actividad.
“Fue en el momento y lo primero que pensé fue eso, se lo dije a Darío (Rodríguez, el técnico de Peñarol de entonces), creo que no voy a seguir, pero llegué a casa, me puse a pensar y dije si estoy bien ¿por qué me voy a retirar? De mi rendimiento nadie puede decir nada”, dijo el jugador que habló con Russo y espera la oferta de Rosario Central.