Boca Juniors derrotó 3-2 a Belgrano con tres goles de Edinson Cavani en La Bombonera. En el cruce de la octava fecha de la Copa de la Liga, el Xeneize arrancó en desventaja y un triplete del uruguayo le dio el triunfo al Xeneize.
El equipo de Diego Martínez jugó un buen partido, no se rindió ante las dificultades y tuvo doble recompensa: se quedó los tres puntos y forjó la recuperación de la confianza goleadora de Cavani.
En la primera etapa Boca hizo méritos para llegar al gol, pero no lo consiguió. El Xeneize volcó todo el peso de su ataque por la derecha con las veloces proyecciones de Luis Advíncula y el peruano encontró en Cristian Medina y Jabes Saralegui los socios para fabricar la ofensiva. Sin embargo, la falta de efectividad ahogó el grito de los delanteros y Belgrano aprovechó una salida defectuosa para ponerse en ventaja.
El local jugó unos primeros minutos muy agresivos y las ocasiones más claras fueron de Miguel Merentiel y Edinson Cavani. Primero, La Bestia atacó una asistencia hacia atrás y disparó con imprecisión por arriba del travesaño. Luego, Edinson Cavani tuvo la oportunidad de conectar un centro, se elevó y cabeceó, pero Nahuel Losada la frenó con el rostro.
Saralegui, que fue indispensable en la creación de juego, también puso en riesgo el arco del Pirata con un remate que se fue a centímetros del palo izquierdo de la visita.
La ventaja para Belgrano resultó de una jugada desprolija, que arrancó con una salida imprecisa de Sergio Romero y una disputa perdida por Campuzano. Lucas Passerini encontró la pelota sin dueño y fusiló al arquero de Boca para el 1-0.
El entretiempo fue oro para el equipo de Diego Martínez, que salió a jugar la segunda etapa con mayor ambición y fiereza.
Después de algunas jugadas que terminaron sin burlar la custodia del arco de Losada, por fin llegó el momento de cortar la racha. A Medina le hicieron un penal y Cavani no dudó en hacerse cargo del tiro. Edinson pateó, gritó y se sacó la mufa. A partir de allí, el maleficio se rompió.
Tras su primer festejo, el internacional se soltó, creció en confianza y definió una jugada que ideó Zenón de forma espectacular. La picó con una calidad magistral y, aunque el VAR le puso suspenso, fue el 2-1.
El tercer tanto llegó casi de forma genuina, Cavani estaba donde tenía que estar, aprovechó un descuido, y selló su triplete personal para el 3-1.
Belgrano descontó con un tanto de Matías Marín, pero Boca ya tenía tramitado el triunfo y celebró en La Bombonera.
El Xeneize alcanzó los 13 puntos y se ubica en quinto puesto del Grupo B, que lidera Godoy Cruz. En su próximo compromiso, el miércoles, visita a Unión de Santa Fe y volverá a ser local el próximo domingo en el clásico ante Racing, que lo supera por un punto en la cuarta posición de la zona.