Lucas “Pipa” Alario fue el gran protagonista del Trofeo de Campeones y la voz autorizada tras la consagración de Estudiantes, que venció 2-1 a Platense en el Estadio Único de San Nicolás de los Arroyos. Ingresó en el segundo tiempo y marcó los dos goles que dieron vuelta la final, confirmando su papel decisivo en un equipo que volvió a mostrar carácter en una definición.
El Pincha no bajó los brazos y, como pasó ante Racing, debió remar desde atrás para quedarse con el trofeo. A los 32 minutos del complemento, apenas cinco después de su ingreso, Alario apareció en el área y conectó de cabeza para marcar el empate. Cuando el encuentro se encaminaba al cierre, el delantero volvió a decir presente: Edwin Cetré envió un centro preciso y el “Pipa” empujó la pelota para sellar el 2-1 definitivo.
Tras la consagración, Alario destacó la fortaleza del grupo y el recorrido del equipo a lo largo de la temporada. “Como ya nos pasó en la final pasada, nos tocó remar desde atrás y eso siempre hace todo más complejo”, señaló el delantero a ESPN.
Más allá del resultado, el atacante puso el foco en la identidad del equipo y en el cierre de un año cargado de emociones. “Lo que más destaco de este año, más allá de los títulos, es el carácter y la personalidad que tiene el equipo para poder cerrar el fin de año con dos títulos”, remarcó.
Finalmente, Alario subrayó el valor simbólico del logro y el camino recorrido por el plantel. “Creo que nos merecíamos esto por todo lo que vivimos”, concluyó el goleador, figura indiscutida de la final y emblema de un Estudiantes que volvió a coronarse.
