El colombiano Jhon Durán sentenció la victoria 2-0 de Aston Villa a Bologna por la tercera fecha de UEFA Champions League.
De entrada o desde el banco es infalible. Muy custodiado por la defensa italiana trabajó a fondo por mantener su frecuencia goleadora y lo consiguió antes de abandonar la cancha.
Su segunda titularidad de la temporada se dio en el torneo continental. El técnico Unai Emery le dio más minutos en casa y desde el comienzo se instaló en el área en un duelo ajustado con el defensor vallecaucano Jhon Lucumí.
Bien referenciado por el colombiano en sus intentos de remates, pasó a la derecha y se tiró atrás para traer la pelota. Ahí también fue controlado por el otro central Sam Beukema, atento a su potencia.
Su opción más clara en el primer tiempo la tuvo de cabeza. Anticipó a su compañero de Selección en el primer palo y remató a las manos del portero visitante.
A los 64’ hizo la diferencia en el área. Confundió a Lucumí por un movimiento que lo dejó mejor perfilado para recibir un centro de la izquierda. De primera cruzó el remate para el segundo tanto.
Festejó y con su tarea cumplida dejó su lugar a Ollie Watkins. Su anotación salva un partido disputado en el que ganó cinco duelos de 12 y de 57 por ciento de efectividad en la entrega de la pelota.
Completó siete goles en la temporada, el segundo consecutivo por Champions.
Aston Villa sigue invicto y con nueve puntos. Visitará a Brujas el 6 de noviembre por la cuarta fecha del torneo.