Luis Enrique se une a los técnicos que ganan la Champions con dos clubes diferentes y además logra la mayor goleada de la historia en una final
BARCELONA -- Luis Enrique se convierte en leyenda. La mayor goleada de la historia en una final de Champions League, 5-0 sobre el Inter de Milán para inscribir su nombre con letras de oro en la máxima competición continental, al frente de un Paris Saint-Germain que, invirtiendo 240 millones de euros, ha acabado por convertirse en un equipo de autor.
El 5-0 del PSG al Inter en la Final de la Champions 2025 supera los 4-0 con que el AC Milan derrumbó al Steaua en 1989 y al Barcelona en 1994, el Bayern Munich al Atlético de Madrid en la repetición de 1974 o el 7-3 del Real Madrid sobre el Eintracht Frankfurt en 1960.
Esta será, por encima de todo y de todos, la Champions de Luis Enrique. Ganó el título en su primera participación al mando del Barcelona del tridente Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar y en su quinta presencia, segunda al frente del PSG, ha vuelto a hacerlo.
Y con una exhibición no recordada, aplastando como no podía imaginarse a un Inter que venía de eliminar al Barça en semifinales y al Bayern en cuartos.
Un Inter tan orgulloso como impotente ante el caudal de futbol de este PSG que debió tomar buena nota del sufrimiento con que ganó el Manchester City hace dos años al equipo de Simone Inzaghi. Esta vez no hubo color. Gloria para el PSG. Y gloria, máxima, para Luis Enrique.
Diez años después de celebrar en Berlín la Champions con el Barça, el asturiano lo hizo en Múnich para convertir al club parisino en el segundo francés en conquistar el trofeo. En la misma Alemania, 360 millas al sur y convertido en el líder, indiscutible e innegociable, de un equipo que convirtió la decepción por la marcha de Kylian Mbappé en el verano de 2024 en la mejor de las noticias al llegarse a la primavera de 2025.
Hace una década, en 2015, Luis Enrique tuvo que transigir ante el mando que personalizaba sin discusión Leo Messi. Ahora ha cerrado un curso perfecto, 319 días después de que la presentación de Mbappé como futbolista del Real Madrid motivara que su PSG no fuera considerado entre los favoritos a conquistar esta Champions.
Convertido en el séptimo entrenador que logra el galardón en dos clubes distintos como hicieron antes Ancelotti, Happel, Hitzfeld, Mourinho, Heynckes y Guardiola, es el segundo que consigue el triplete en dos equipos diferentes, como hizo Pep en 2009 con el Barça y 2023 con el Manchester City. Luis Enrique, una década después de lograrlo de azulgrana ante la Juventus volvió a hacerlo, como Guardiola, contra el mismo Inter, en su quinta participación.
Y a través de un atropello no recordado en una final. Demostrando ser de la misma escuela de Pep Guardiola, obsesivo en su trabajo, dominante en el mando del vestuario y tan valiente como transgesor en el juego, Luis Enrique ha acabado con la maldición que acompañaba al multimillonario proyecto del PSG.
Como hiciera el Chelsea en 2013, este 2025 será recordado como el año de un equipo que no alcanzó el cénit con Messi, Neymar y Mbappé como no lo había hecho antes con Zlatan Ibrahimovic... Y que sí lo ha conseguido con una idea de juego, anteponiendo el grupo a las individualidades. Y devolviendo al entrenador al centro del escenario.