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Champions League, capítulo 13: La Premier manda en Europa

Gracias a Lucas Moura, los Spurs dieron la segunda sorpresa de las semifinales. Getty Images

Liverpool-Tottenham. La Champions disfrutará de una final inédita y apasionante, con protagonismo, otra vez, de la Premier League, una década después de la que jugaron en Moscú, Chelsea y Manchester United.

En Amsterdam la sorpresa fue tan mayúscula el miércoles como había sido el martes en Liverpool. Vencía el Ajax por 2-0, tenía la final en la mano… Y le dio la vuelta el Tottenham, con un gol final con el tiempo añadido acabándose. Lo nunca visto, un hito histórico para los Spurs y un golpe terrible para el joven y descarado, y brillante pero inxperto, Ajax.

Un día antes, en Anfield, el Liverpool completó la mayor remontada vivida jamás en unas semifinales de Champions, volteando el 3-0 con que viajó el Barça a Inglaterra y que le suponía medio billete… Que tiró por la basura en una segunda mitad eléctrica de los reds, que repetirán final con el objetivo de sacarse la espina del año pasado.

LIVERPOOL 4-0 BARCELONA

Aplastamiento. El Barça no aprendió la lección de Roma y un año después volvió a ser barrido en un partido de vuelta indigno, esta vez en semifinales, en Inglaterra y en un estadio tan mítico como eléctrico. Anfield fue el escenario de un aplastamiento que duró 40 minutos, los transcurridos desde que Luis Suárez, al inicio del segundo tiempo, falló un cara a cara con Alisson y hasta que el árbitro señaló el final, con un 4-0 tan impensable como dramático para el equipo de Valverde, incapaz de responder al reto presentado por un Liverpool sobresaliente.

Fallos individuales y fallos de concentración, indigno el 4-0 final, condenaron al peor Barça que se recuerda, que pudo y debió sentenciar en la primera mitad y no consiguiéndolo se entregó a un segundo tiempo en el que quedó desnudo y sin respuesta.

Campeón por quinta y última vez en 2005, el Liverpool de Jurgen Klopp disputará su segunda final consecutiva, con el ánimo catapultado y dispuesto a llevar al Wanda Metropolitano esa intensidad salvaje que le valió para pasar por encima de un Barça al que ni Messi pudo esta vez rescatar.

AJAX 2-3 TOTTENHAM

La Sorpresa. Lo rozó el Ajax y lo conquistó el Tottenham. Del 2-0 con que ganaban los holandeses a los 35 minutos al 2-3 final, conseguido por Lucas Moura en el 96, cuando la hinchada local temía ese desenlace fatal, agazapado su equipo y defendiendo como podía ante el asalto de los ingleses.

La generación de los De Jong y De Ligt no podrá amular al maravilloso Ajax de Van Gaal, de mediados de los 90, ni tampoco al legendario liderado por Cruyff a comienzos de los 70. El nuevo siglo aún deberá esperar la revolución 'ajaccied'.

El Ajax comenzó en modo aplastamiento y el Tottenham acabó en modo gigantesco, se entendía tan imposible para el Tottenham remontar el 0-1 de la ida como se había supuesto un día antes la catapulta del Liverpool, pero tal como lo hicieron los reds, los Spurs completaron una segunda mitad magnífica en Amsterdam y conquistaron el milagro. Y el premio máximo de la final.