Martín Parra ya puede entrenar de forma progresiva en Universidad de Chile. El portero de los azules fue dado de alta tras sufrir un trauma acústico por las bombas de estruendo que cayeron cerca de él durante el suspendido clásico ante Universidad Católica en Valparaíso por Copa Chile la semana pasada.
El golero de los laicos se presentó este jueves en la Clínica Universidad de Los Andes para realizarse los chequeos médicos de rigor y recibió la buena noticia.
Después, el club emitió un comunicado para detallar la situación del cancerbero y sostuvo que "los resultados evidenciaron que ha evolucionado favorablemente con una leve mejoría".
Eso sí, en la misiva, el conjunto estudiantil sostuvo que el jugador "aún presenta un defecto auditivo que debe seguir siendo monitoreado constantemente", y agregó que su reintegro deportivo total "queda sujeto a una evaluación diaria especializada".
El último miércoles trascendió que el suspendido clásico entre cruzados y azules podría reanudarse el próximo 13 de octubre, en un estadio que todavía se debe definir.