El portero Santiago Mele describió su participación en la última jugada del partido en la que Junior venció 3-2 a Deportes Tolima por la quinta fecha del cuadrangular B de la liga colombiana.
A la uruguaya se vale, claro. Hay un cupo a la final...
Y allá fue el arquero, para ayudar a su equipo, golpeado de ánimo por el empate inesperado en seis minutos. Se encomendó a sus raíces de fútbol aéreo y cabezazo potente para distraer, agitar el área y encaminar el triunfo que lo deja con opciones hasta el cierre del grupo.
Su frentazo en el tiro de esquina lo sacó un defensor de la línea y dejó vivo el rebote conectado de cabeza por Emanuel Olivera en el tercer gol. Misión cumplida.
“En este momento estamos contentos porque pudimos conseguir la victoria sobre el final. Cuando pitan el tiro de esquina yo miré al banco para ver si alguien me incentivaba y vi que el profe Isaac me hizo la seña y dije voy. Siempre he visto que al arquero le cuesta tomarlo porque no lo tienen referenciado. No pensé en nada. Con Junior es hasta el final y esto no se termina hasta que se termina. Hay que darle la gloria y la honra a Dios, porque nos respaldó. Sabemos que Dios escucha nuestras oraciones y vamos a pelear hasta el final con mucha fe”, relató Mele.
El 3-2 a los 95' dejó a los barranquilleros segundos en su zona con siete puntos, dos menos que el líder Once Caldas. Para clasificar, deberá vencer al eliminado América en Cali y esperar por una derrota de los albos en Ibagué.
Olivera reconoció el aporte de su compañero que sacudió el estadio Metropolitano.
“Muy contento por él, la verdad que medio gol es de Santi, fue un 50-50", indicó.