Ángel Di María abrió el marcador de Argentina ante Brasil en la final de Copa América con un golazo de zurda tras un gran pase de Rodrigo De Paul. El Fideo recibió la pelota, encaró al arquero en soledad, y se la picó por arriba. Fue el 1-0 de la Selección Argentina que desencadenó en un buen recuerdo: el gol del mismísimo Di María en la final de los Juegos Olímpicos 2008.
La final fue ante Nigeria en Beijing y el gol de Di María significó el 1-0 con que Argentina se subió a lo más alto del podio y se trajo la medalla dorada. En aquel equipo jugaba también Lionel Messi y fue el 10 de la selección el que asistió a Di María, lo dejó solo frente al área rival, y después Fideo definió igual que ante Brasil: con un toque sutil por abajo de la pelota para que viaje al fondo de la red por encima del arquero.
13 años pasaron de aquella final ante Nigeria en la que Argentina alcanzó la gloria olímpica, de la mano del mismo goleador que busca hoy la hazaña en el Maracaná, ante Brasil, y por la Copa América: Ángel Di María.