Sin brillar, Nacional se quedó con un importante triunfo por 2-1 en el debut en CONMEBOL Libertadores ante Metropolitanos de Venezuela en Caracas, en un encuentro que estaba obligado a ganar ante el rival más débil del grupo B que ambos comparten con Inter de Porto Alegre e Independiente Medellín, un contrincante directo en la pelea no solo por la clasificación sino por el tercer lugar para la CONMEBOL Sudamericana.
Álvaro Gutiérrez ensayó varias variantes en el once para cambiarle la cara al equipo y buscar alternativas tras la derrota clásica ante Peñarol del pasado sábado, pero el equipo fue lento, anunciado y parsimonioso. No lo ayudó la cancha; un césped largo y con pozos, aunque el equipo tampoco demostró la actitud para disimularlo.
Los puntos más altos del Bolso fueron Alfonso Trezza, que ingresó al once en lugar de Diego Zabala, Emmanuel Gigliotti (por Gastón Pereiro) y Francisco Ginella (por Diego Rodríguez), dándole sentido a los cambios del DT. Sin embargo, el equipo no tuvo la dinámica deseada con Ginella por largos pasajes del encuentro, Trezza obligó pero tampoco fue asistido en velocidad, y Gigliotti abrió el marcador y tuvo alguna chance, aunque no lo buscaron tanto por arriba, en uno de los puntos más flojos de los venezolanos.
Pese a los puntos bajos del equipo, como la nula generación de juego y el flanco izquierdo a nivel defensivo que le viene trayendo pesadillas y que fue responsable de la igualdad parcial de Metropolitanos, el Tricolor se encontró con un golazo de Ginella sobre el final que le da aire, no solo en la CONMEBOL Libertadores, sino en el proceso de construcción que lleva a cabo con Gutiérrez. Sin merecerlo del todo, Nacional venció a un rival débil y puede corregir ganando de cara al futuro.