Liga de Quito sufrió una durísima derrota ante Palmeiras, por 4-0, que lo dejó fuera de la CONMEBOL Libertadores. La ilusión con la que viajó a Brasil, por el 3-0 en la ida, se esfumó cuando chocó con la realidad y la puesta en escena del Verdao.
El cuadro de Tiago Nunes salió timorato y con muchos nervios. No pudo encarar el ataque potente de Palmeiras, algo que no mostró en Quito y fue Liga el que se llevó por delante al cuadro brasileño.
Con un planteamiento muy defensivo, con una línea que casi siempre fue de cinco jugadores, Liga no tuvo oportunidades de atacar. Jeison Medina quedó muy aislado, con Lisandro Alzugaray que le tocaba replegarse para sumar hombres en defensa.
Liga sí extrañó mucho a Bryan Ramírez, el hombre más importante en la ida y que fue expulsado. Josué Cuero se limitó más a la tarea defensiva y el equipo no tuvo a un jugador que podía tener la pelota, apilar rivales y estar presente en el campo contrario. En la ida fue difícil de descifrar para Palmeiras y sin esa preocupación pudieron someter a su rival.
El cuadro ecuatoriano no supo administrar esa ventaja, que parecía ya el boleto hacia la final de Lima. No tuvo tranquilidad para manejar el balón en los pasajes en los que Palmeiras bajó el ritmo, por lo que se dedicó más a resistir.
Los jugadores que brillaron en el torneo, no estuvieron a tono con el partido. Ricardo Adé estuvo errático, Carlos Gruezo contuvo poco y cometió el penal para el cuarto gol, mientras que Gabriel Villamil fue mucho recorrido en la cancha, pero poco aporte para avanzar.
El marcador final reflejó las complicaciones que tuvo Liga en el partido y la falta de un plan certero para sostener una amplia ventaja. Pese a la corta de su plantilla lograron meterse entre los cuatro mejores del torneo, pero se quedó con el sueño truncado de llegar a otra final.
