Sebastián Barquero es un joven futbolista de 19 años que fue cedido a préstamo por parte de Saprissa al Diriangén FC de Nicaragua, pero su estadía en ese país en los últimos días se ha convertido en una pesadilla tras la propagación del COVID-19 (coronavirus), por eso externó su preocupación y espera regresar a Costa Rica para reunirse junto a su familia.
En entrevista con ESPN, Barquero reveló que siempre está en constante comunicación con el gerente deportivo de Saprissa, Víctor Cordero, quien ha mostrado su preocupación por el futbolista y, en caso de que se suspenda el torneo pinolero, hará todo lo posible para que regrese al país, pese a que se cerraron las fronteras.
“La verdad para mí es muy difícil porque no estábamos enterados sobre eso, de hecho fue antes de un partido que nos confirmaron que había un caso. De inmediato llamé a mi casa y les conté. Mi papá me dijo que les avisara para ver qué hacemos, entonces acudí a Víctor Cordero, le comenté que quiero regresar a Costa Rica porque estoy muy preocupado y no hemos dejado de hablar. Apenas sepa algo, me comunico con él para ver si me puede ayudar a regresar”; dijo Barquero.
— Cacique Diriangén F.C. (@1917Diriangen) March 22, 2020
Otra de las preocupaciones que tiene Sebastián Barquero es que en Nicaragua el campeonato de fútbol aún no se suspende, en efecto este lunes será determinante para que tomen una decisión, pues la mayoría de los jugadores están indispuestos a seguir jugando por el aumento de casos de coronavirus en ese país.
“Varios equipos no han querido jugar por toda esta situación y es que muchos jugadores tienen familiares que forman parte de la población en riesgo. Yo tengo tres hermanos pequeños, siempre paso pensando en ellos y estoy en constante comunicación con mi papá para saber cómo están. Donde vivo paso encerrado y, si no hago nada, me aburro demasiado y no puedo estar así, por eso necesitamos una solución”; opinó.
Aunado a eso, el jugador explicó que actualmente vive en una casa club junto a cuatro extranjeros más. Tratan de mantener el aseo y estar en constante limpieza, pero el problema que presentan es al momento de comer, ya que tienen que salir a una soda cercana y eso podría generar algún tipo de riesgo.
“En caso de que no pueda viajar me quedaré en la casa club, en donde he permanecido todo este tiempo. Hemos comprado mascarillas, alcohol en gel, guantes y todo lo necesario para protegernos. Estamos muy preocupados, la verdad no queremos ni salir de la casa. Vivimos cuatro extranjeros y, a mí lo que más me preocupa, es cuando salimos a la calle porque la comida nos la dan en una soda. Vamos rápido y luego nos devolvemos”; explicó.
En caso de una posible suspensión del balompié pinolero, Barquero comentó que “todo va a seguir igual y mi salario no sufrirá alguna variación”; no obstante, insiste en que su deseo es regresar a Costa Rica para mantenerse con su familia.