Barcelona busca cambiar el rumbo por el que ha caminado en los últimos tiempos y apunta a una “refundación”, según indicó el presidente del equipo Antonio Álvarez. El cambio de modelo de gestión apunta sobre todo a encontrar un ADN idóneo y sobre todo dar protagonismo a sus juveniles.
“Hicimos una profunda radiografía. ¿Qué estamos haciendo mal? Hay que empezar a sincerarse y a preguntarse por qué quedó campeón solo 3 veces en 27 años. Hemos cometido errores de gestión, sin echar culpas, pero aceptando. Debemos hacer una gestión que tomará tiempo, para que camine y sea positivo, implementar políticas en lo administrativo y deportivo”, arrancó Álvarez en rueda de prensa.
Álvarez apuntó que vienen realizando un trabajo exhaustivo con los jóvenes de la cantera y dijo que realizarán algunos cambios para darles protagonismo. El plantel deberá contar con al menos 17 juveniles, entre los convocados para cada partido deberán estar 3 de ellos y sumar 300 minutos de juego con el formato actual, por etapa. Para la próxima temporada quieren contar con entre 6 y 10 juveniles.
“Debemos generar infraestructura para elevar el nivel de competencia en el plantel y formativas. Comprender en un proceso el principal objetivo es implementar nuestro ADN y cuando lo encontremos cuidarlo como nuestro tesoro. Es parte de la refundación. Esto comprende siempre tener un equipo competitivo, de jerarquía e involucrar a nuestros jóvenes en el primer plantel, con minutos en cancha”, agregó el directivo.
Del lado de Ariel Holan, el entrenador explicó sobre el proceso para que los juveniles tengan oportunidades: “Es un proceso y empieza por la parte nutricional. Desayunan y almuerzan en el club. Es un esfuerzo grande y saben que no todos los chicos pueden tener acceso a todos los requerimientos nutricionales de un deportista de alto nivel. Cuando uno ve que esas virtudes y habilidades se emparejan con las de primera, eso marca que están para una oportunidad”.