BARCELONA -- El Real Madrid se disculpó con el Barcelona, revelaron fuentes del club azulgrana a ESPN Deportes, por su decisión de personarse en el caso Negreira cuando el juez lo acepte a trámite. Desde el Madrid se argumentó "que estaban muy presionados por su entorno y no podían permanecer de perfil" una vez la Fiscalía anunció su denuncia formalmente.
El propio presidente del Madrid, Florentino Pérez, conversó con Joan Laporta para explicarle su cambio de postura después de que el sábado convocase una reunión urgente de su Junta Directiva para tratar el caso y el domingo el club publicase una nota informativa dando a conocer su determinación de personarse en el procedimiento en cuanto el juez lo acepte a trámite.
El Barça, que estaba avisado "antes y después", encajó con decepción el cambio de postura de la entidad merengue dando cuenta que "puede hacer lo que estime, pero no lo compartimos" la posición adoptada por Florentino, reconociendo que las relaciones institucionales entre los dos clubs "se han enfriado" por este asunto.
Tal es así, que el Clásico que disputarán los dos equipos el domingo en el Camp Nou no estará, muy probablemente, precedido por el habitual almuerzo entre las directivas de los clubes. "No está previsto", se advierte desde el Barça, aunque sí se espera que a pesar de esta frialdad Florentino Pérez acuda al Palco del estadio a presenciar el partido junto a Laporta.
CALMA Y SEGURIDAD
A punto de cumplirse un mes desde que estalló el escándalo, desde el Barcelona se mantiene la calma y la seguridad. Si el lunes el presidente reforzó la figura del club en un acto privado con los capitanes de todas las secciones en el que dio muestra de su intención de "enfrentarme a los sinvergüenzas que manchan nuestro escudo", el martes su asesor Enric Masip mantuvo un tono más frío.
"Todo está en sumario y no se puede explicar nada hasta que siga el proceso de investigación, pero estamos indignados por el trato que está recibiendo el club. El Barça es una entidad con una historia y unos valores que duele que se quiera atacar lo que nos hemos ganado deportivamente" relató, sentenciando que la inocencia del club está fuera de toda duda.
"Barça nunca ha hecho nada malo y nunca ha comprado ningún árbitro, lo ha ganado todo en el campo. Las cosas se pueden mirar, como se podrían mirar en otros clubs y actuaremos en contra de todo el mundo que quiera dañar nuestra historia y nuestro prestigio porque no lo merecemos" resolvió.