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Por qué el pase a Atlético Madrid es beneficioso para Julián Álvarez

Un paso adelante. Julián Álvarez, de 24 años, dejó el Manchester City para seguir su carrera en el Atlético Madrid. Este lunes se hizo oficial el pase del delantero argentino campeón del mundo, quien llegó al equipo dirigido por Diego Simeone en busca de más minutos de juego. Esa es la razón fundamental por la que la Araña llegó al Colchonero.

¿Por qué la llegada a Atlético es una buena noticia para Julián?

A su corta edad, Julián Álvarez ya ganó todo. A nivel de selecciones, conquistó con Argentina el Mundial de Qatar 2022 y fue bicampeón de la Copa América. Además suma una Finalíssima. Todo bajo la conducción de Lionel Scaloni. En cuanto a las competencias de clubes, ganó títulos locales y la Copa Libertadores con River Plate y también logró con Man City dos veces la Premier League y en 2023 se coronó en la UEFA Champions League, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes.

Álvarez ya acumula 17 títulos en el fútbol profesional. Tuvo mucho éxito en el City: marcó 36 goles y logró seis títulos en 103 partidos durante dos temporadas. El argentino siempre fue tenido en cuenta por Guardiola, aunque en general fue suplente del romperredes noruego Erling Haaland, lo que no le permitió tener tantos minutos en cancha. Ese motivo, indudablemente, fue clave para decidir cambiar de aire, dejando el City y continuando su carrera en el Atlético de Madrid.

En este momento de su carrera, Julián afronta un desafío especial, nuevo, diferente en su carrera deportiva. Es que si bien Atlético de Madrid, con su compatriota Simeone en el b,anco es siempre protagonista en LaLiga, el título de campeón español en general se lo reparten Real Madrid y Barcelona. Y además pretende dar pelea con el Colchonero a nivel europeo para tratar de darle la primera Champions League. Con el Cholo como DT, el equipo de la capital estuvo muy cerca de ganarla una vez y dio batalla en más de una ocasión. Además, obtuvo la Supercopa de Europa y la Europa League.

Sin dudas, el desafío mayor para Álvarez y para su nuevo club es poder coronarse en la Champions. Es "el" torneo de clubes y el que todos los europeos sueñan con ganar. Por eso el argentino pasó de un equipo en el que ganó todo, literalmente, a ir por una meta igual pero con un plantel distinto, sin tantas estrellas. Ahora también llegó el mediocampista inglés Connor Gallagher, proveniente del Chelsea, y eso también ilusiona mucho a los hinchas colchoneros.

Así las cosas, Álvarez busca más acción en cancha, pese a que en cuanto a títulos se dio todos los gustos y todavía no llegó a los 25 años. En ese aspecto, vive una realidad maravillosa, muy distinta a la mayoría de sus colegas. Inclusive, grandes figuras del fútbol mundial aún no pudieron conseguir ni la mitad de sus éxitos. Simeone pidió expresamente a la Araña en este mercado de pases y él quiere jugar más y convertir muchos más goles.

En la última Premier League, Julián jugó 54 partidos, anotó 19 tantos y aportó 13 asistencias, con 3.481 minutos en cancha. Igual, aprovechó una lesión de Haaland, ya que en la Champions League, por ejemplo, sufrió más partidos mirándolos desde la banca que intentando aportar lo suyo dentro del campo de juego. En su primera temporada, disputó 49 encuentros, metió 17 goles y asistió en cinco oportunidades, con un total de 2.526 minutos.

Por eso mismo optó por este cambio de país, de liga, de compañeros, ya que ahora jugará con Rodrigo De Paul, Nahuel Molina y Ángel Correa, campeones en Qatar con la Araña, y de entrenador, pasando de ser dirigido por Guardiola a un estilo distinto bajo la batuta de Simeone. El delantero que marcó cuatro tantos en la Copa del Mundo 2022 pretende estar más tiempo en cancha y sentirse más importante para su equipo. Será muy valioso en una formación que tiene a un pilar como el francés Antoine Griezmann, rival en dicha final en Qatar.

Julián es un delantero especial, no puramente de área, porque colabora muchísimo con los volantes, ya que baja a recuperar la pelota y se la pasa corriendo a los defensores rivales, tratando siempre de quitar el balón. No es un Nº9 clásico y es una pesadilla para sus adversarios de turno, porque les genera una gran presión siguiéndolos ante cada salida desde el fondo. Ya trabajó con distintos tipos de entrenadores: empezó con el River de Marcelo Gallardo, se luce en la Albiceleste con Scaloni y se destacó en el City de Guardiola, para llegar ahora al Atlético de Simeone.

Sin escalas, Julián pasa de ser habitual relevo en el City de Guardiola, el equipo de mayor posesión, con todos los futbolistas siendo importantes en la circulación y con buenas entregas, a ser titular en el Atlético de Madrid de Simeone, quien suele jugar de contraataque, cediéndole la pelota en general al de enfrente, en casi todos los casos. Ahora deberá adaptarse a un esquema distinto, a jugar con mayor espacio, aprovechando su velocidad contra defensas abiertas, al actuar su nuevo equipo de contragolpe. Ya no tendrá que buscar generar espacios entre los centrales y volantes bien cerrados, como le pasaba en el City, y tendrá que aprovechar otras virtudes en llegadas diagramadas de otra manera.

Por eso, tiene un lindo desafío por delante. Y tiene armas para volver a destacarse, como a cada paso en su carrera.