Atlético de Madrid jugó uno de sus peores partidos en mucho tiempo, se salvó de la goleada y con la derrota por 1-0 frente a Betis se quedó sin invicto en la 11ma. fecha de LaLiga.
El único tanto lo convirtió el uruguayo Josema Giménez, en contra de su valla, a los 4 minutos de juego.
Las numerosas y significativas bajas, seis en Betis y cinco en el Atlético, no sirvieron de excusa para restar interés a un partido que reunió a dos equipos con ganas de reivindicar su protagonismo en LaLiga después de las decepciones de esta semana en competiciones continentales.
El conjunto del chileno Manuel Pellegrini se plantó en el campo con la intención de dar continuidad a la victoria de la pasada jornada en Pamplona (1-2) para asentarse en la lucha por los puestos europeos, a la espera de empezar en la venidera semana su caminar por la Copa del Rey.
Los del Cholo Simeone, que también ganaron su último partido en LaLiga, al Leganés (3-1), llegaron a Sevilla desbancados de la tercera plaza, tras el triunfo del Villarreal en Valladolid (1-2), pero también con la posibilidad de ponerse a sólo un punto del segundo, el Real Madrid, después de la goleada sufrida el sábado por el equipo blanco (0-4) en el Clásico ante el Barça, pero la derrota finalmente les hace perder un puesto y aumentar la incertidumbre.
Simeone probó en esta ocasión con el mozambiqueño Reinildo Mandava en el lateral izquierdo y con el brasileño Samuel Lino por delante de él, con lo que dejó en el banco al delantero noruego Alexander Sorloth, pero antes de que se cumpliera el minuto 4 del encuentro se le vino abajo su planteo con el 1-0.
Betis presionó mucho de entrada y eso valió para que el marroquí Ez Abde encontrara espacio por la izquierda del avance local y que sacara un centro en el que el uruguayo José María Giménez, en su intento de despejar, despistara al arquero esloveno Jan Oblak y metiera el balón en su arco.
El tanto no modificó el ímpetu del conjunto sevillano ante un rival al que le costó encontrar a sus dos delanteros, el francés Antoine Griezmann y el argentino Julián Álvarez, y que vio cómo al cuarto de hora Abde perdonó el segundo para los suyos solo ante Oblak.
Los visitantes cambiaron a una línea de cinco defensores, pero no fue suficiente para evitar el vendaval que se les venía encima ante su área, con continuas llegadas de los de Pellegrini en busca de un segundo tanto que pudo llegar otra vez con la intervención de Abde poco antes de la media hora, pero el balón lo repelió el travesaño.
Los verdiblancos se fueron al descanso contrariados porque su gran juego solo se hubiera reflejado en el marcador con un gol, mientras que los rojiblancos respiraron hondo cuando se marcharon a los vestuarios tras una primera parte en la que no les salió nada.
Simeone hizo dos cambios desde el inicio de la segunda mitad, con la entrada de Sorloth y de Javi Galán en lugar del inglés Conor Gallagher y de Reinildo, y con ello el Atlético de Madrid fue algo más protagonista, aunque el Betis se mantuvo crecido, pero con la duda de saber si podía mantener el nivel físico mostrado.
En el minuto 65 llegó una jugada polémica, cuando Pablo Fornals remató al travesaño y el balón le llegó rechazado en un lance en el que Javi Galán despejó pero con la cabeza del bético por medio. El árbitro pitó penal pero, tras verlo en el VAR, rectificó.
El 1-0 dejó el partido abierto para su fase final, hasta el punto de que el argentino Ángel Correa, tras pocos minutos en el campo, estrelló el balón en la cepa de un poste (m.80) y poco después en el travesaño, aunque al Atlético se le fue el tiempo y no pudo forzar el empate.