SANTIAGO -- El central argentino Nico Pareja ha dicho que su renovación por el Sevilla es una "alegría doble" porque "significa mucho" para él, pero también porque "alienta a jugadores que lo han pasado mal o tuvieron momentos complicados", como la grave lesión de rodilla que él superó tras estar un año de baja.
Por ello, Pareja, de 32 años, ha admitido en rueda de prensa que haber prolongado su vínculo con el Sevilla hasta 2019 es "muy especial" y le produce una "alegría difícil de expresarlo con palabras", porque su deseo era seguir en la que considera su "casa".
El defensa internacional ha agradecido que el club "siempre" haya "confiado en que pudiera formar parte de esta gran familia" y también se ha acordado de "los compañeros, técnicos y representantes que en los momentos duros han tenido palabras de apoyo", pues "seguir no habría sido posible si el apoyo de todos".
Nico Pareja, uno de los puntales de la zaga sevillista desde su llegada en 2013 procedente del Spartak de Moscú, ha reconocido que durante su convalecencia "hubo días de incertidumbre", si bien él "sabía que volvería a ser como el de antes" porque se debía a sí "mismo jugar una 'Champions' con este equipo".
También ha subrayado que se toma como "un premio" que, tras su plena recuperación, se diga que es "el mejor fichaje".
Para Pareja, su compatriota Jorge Sampaoli "es un gran entrenador, que viene a uno de los clubes más importantes de Europa" y del que ha destacado "sus ideas" futbolísticas y, que el plantel está "tratando de aprender interpretar" para desarrollar "el fútbol ofensivo que quiere", si bien ha admitido que "hay que pulir detalles".
El bonaerense ostenta esta temporada la capitanía del Sevilla, aunque ha asegurado que su "responsabilidad en este equipo es la misma" desde que llegó porque el director deportivo, Ramón Rodríguez 'Monchi', "hace saber a todos los nuevos lo que es este club", de modo que tiene la "misma responsabilidad, pero con más ganas".
En cualquier caso, el zaguero ha resaltado la "buena adaptación de los chicos argentinos" que han llegado, pero también de "gente como (el japonés Hiroshi) Kiyotake, que tiene una cultura completamente distinta y que ha venido, como todos, con mucha humildad para intentar que el Sevilla crezca como equipo".