BARCELONA -- Prudente en las formas y más aún en el discurso, el FC Barcelona se mantiene a la espera de acontecimientos para no dar ningún paso en falso con el, deseado, fichaje de Neymar, una operación que desde la directiva se mantiene oficialmente fuera del escenario aunque diversas fuentes consultadas por ESPN Digital admitieron tener en el radar.
El fichaje de Antoine Griezmann, que se espera hacer oficial en los próximos días, no significa, en absoluto, que se descarte la operación por Ney, por más que se entienda la dificultad del encaje económico de dos operaciones que ya se consideran las de mayor calado en la historia del club y que provoca el movimiento de varias piezas en el vestuario, obligadas para reducir la masa salarial además de hacer frente al desembolso de ambas incorporaciones.
Neymar conoce las condiciones del Barça. Su salario mantendría el status que tenía en el momento de su marcha, unos 23 millones de euros fijos de salario, muy lejos de los 36 millones que entre sueldo e incentivos se reveló en las filtraciones de ‘Football Leaks’. En el club azulgrana podría alcanzar, sin embargo, los 30 millones cumpliendo una serie de variables y bonus extras, ligados tanto a su rendimiento personal en el terreno de juego como a la conquista de títulos, con la Champions League, claro, en el primer plano.
El vicepresidente del club azulgrana, Jordi Cardoner, confirmó implícitamente que el jugador brasileño “quiere volver al Barcelona” y aunque dejó claro también que la junta directiva “no ha tratado el tema”, en el Camp Nou existe conocimiento de los pasos que se van dando, siempre atento el club azulgrana de la postura que vaya a tomar el PSG.
DISCRECIÓN
En la noche del lunes una de las personas consultadas se apresuró a desmentir una información que situaba en Barcelona al padre de Neymar y al asesor del club André Cury para llevar a cabo una reunión. “No hay ninguna constancia de ello”, se explicó desde Barcelona, a la vez que desde Brasil una fuente muy cercana a la familia del delantero aclaró que Neymar Silva “no ha viajado a Europa”. De hecho, el progenitor del crack se mantiene en un segundo plano, evitando un protagonismo que se entiende contraproducente.
Los encuentros, siempre privados, entre los asesores del delantero y representantes en nombre del Barça ya han existido con André Cury como protagonista especial. Y de esas conversaciones ha surgido un pacto tácito: mantener una absoluta discreción y adoptar un perfil bajo, lejos de cualquier enfrentamiento que pudiera dificultar más si cabe una operación que se reconoce en el entorno del jugador “complicada”.
Es por ello que contrariamente a lo aventurado por algunos medios españoles en días pasados, Neymar, que se sigue recuperando de su lesión de tobillo, sí estaría en disposición de viajar a París, junto a su padre, para asistir a la presentación de la pretemporada del PSG. El futbolista vivió directamente la situación que atravesó Rabiot al negarse a renovar y aconsejado por sus asesores no tiene intención de forzar un divorcio de malas maneras, más aún cuando desde París el presidente del club galo ya abrió la puerta a todos los escenarios posibles y no rechazó una información del diario L’Equipe en la que se consideró “probable” su traspaso.
A partir de ahí, cualquier opción de negociación pasaría por conocer las exigencias del PSG, entendiéndose que en un desembolso cuyo montante superase los 225 millones de euros entraría la opción de un trasvase hacia el club francés de algún o algunos jugadores deseados por el club galo, con Coutinho, cuya valoración ya tiene clara el Barça, en el primer plano. Y, desde luego, el juego de comisiones, recordando que en el fichaje de Neymar por el PSG en el verano de 2017 supuso unos pagos adicionales a los que no quiere enfrentar ahora el club azulgrana.