El Málaga ha anunciado planes para iniciar un "procedimiento de despido colectivo" que podría llevar al club español a prescindir de la mitad de su plantilla del primer equipo.
El equipo de segundo división estrenó en la administración en febrero, poniendo fin al reinado del controvertido propietario Abdullah bin Nasser Al Thani y alimentando las especulaciones de que no podrían completar la temporada debido a la mala gestión financiera.
El Málaga finalmente escapó del descenso a la tercera división de España, no profesional, a principios de este mes, al terminar número 14 en la tabla de la segunda división, a solo dos puntos de la caída.
"A partir de hoy, la dirección del Málaga Club de Fútbol S.A.D ha comunicado a la plantilla su intención de iniciar un procedimiento de destitución colectiva", dijo el club en un comunicado este lunes. "El club ha tenido que tomar algunas decisiones difíciles en los últimos meses.
En esta ocasión, la reestructuración impactará directamente en el primer equipo masculino. Esta nueva reestructuración se suma al plan económico que pretende sacar al club de la complicada situación financiera en la que sigue inmerso, a pesar de los recientes esfuerzos ”.
Los administradores mantuvieron una serie de reuniones el lunes por la mañana, un día después de que el equipo había jugado su primer amistoso de pretemporada antes de la campaña 2020-21.
A los jugadores se les informó que el club estaba implementando un 'ERE' o plan de despido colectivo, un mecanismo bajo la ley española que permite a una empresa reducir su plantilla en determinadas circunstancias.
En mayo, el Málaga anunció planes para despedir trabajadores debido a la situación financiera, mientras que los jugadores no se verían afectados.
En el campo, el Málaga ha estado en un declive constante desde que alcanzó los cuartos de final de la Liga de Campeones en 2013 con un equipo que cuenta con jugadores de renombre como Isco, Joaquín y Julio Baptista.
En ese momento ya había señales de problemas financieros a raíz de la toma de posesión del empresario qatarí Al Thani en 2010, que se profundizó antes del eventual descenso del Málaga de La Liga en 2018.
En enero, el presidente de La Liga, Javier Tebas, advirtió que el club tendría que aportar 2 millones de euros de las ventas de jugadores para evitar el castigo, incluido un posible descenso administrativo, por contraer deudas con jugadores y las autoridades fiscales españolas.