Los posibles objetivos del PSG, como Lewandowski, Tchouaméni o Bernardo Silva, no llegaron a tener el club parisino entre sus posibles objetivos.
El regular resultado del mercado de verano para el Paris Saint-Germain, tras no lograr la contratación de Milan Skriniar y una operación salida limitada en nombres e ingresos, ha generado tensión entre los responsables deportivos del club.
El responsable de la gestión deportiva, el portugués Luis Campos, y el entrenador, Christophe Galtier, están bastante descontentos con el resultado del trabajo del luso Antero Henrique, exdirector deportivo y encargado de las salidas, según coinciden este viernes L'Equipe, Le Parisien y RMC Sports.
Por un lado, el principal chasco fue el no poder fichar al central eslovaco Milan Skriniar, por el que el Inter no se bajó de su petición de 80 millones de euros por el traspaso, a pesar de que el propio presidente del PSG, Nasser al Khelaifi, se implicó al final en las negociaciones.
Skriniar era el objetivo clave del mercado para los parisinos, a fin de apuntalar la defensa, incluso como titular ya que Galtier suele jugar con tres centrales y dos carrileros.
Pero el Inter no aceptó la última oferta de 65 millones del PSG a pesar de que al jugador le queda solo un año de contrato.
Otros posibles objetivos del PSG, como Lewandowski, Tchouaméni o Bernardo Silva, no llegaron a tener el club parisino entre sus posibles objetivos.
A Henrique se le reprocha también que, aunque consiguió sacar a buena parte del lastre del quería desprenderse (Herrera, Paredes, Gueye, Diallo, Draxler, Kurzawa, Wijnaldum o Kehrer), el club solo obtuvo 49 millones de euros en traspasos (que podrían ser algo más con bonificaciones), ya que muchas salidas fueron a través de cesiones y muchas a última hora.
Se trata de una cifra muy lejana de los 150 millones de euros que se había marcado el club como objetivo a fin de ajustarse al "fair play" financiero de la UEFA, por lo que el PSG no se ha ajustado a su plan de fichar con el dinero procedente de los traspasos.
Otro punto es que Paredes (Juventus) y Draxler (Benfica) han sido cedidos a rivales directos del PSG en el grupo H de la Liga de Campeones.
Además, las dos principales figuras que el PSG quería ver partir, el costarricense Keylor Navas y el argentino Mauro Icardi, seguirán en París al menos hasta el mercado de invierno.
Desde el lado de Henrique se responde que el PSG chocó con la realidad del mercado europeo, donde solo la Premier ha tenido mucho dinero para fichar. Más aún por la dificultad de desprenderse de jugadores con varios años pendientes de contratos muy generosos.
A nivel de llegadas, el PSG sí logró en este mercado renovar casi totalmente su cuestionado del centro del campo, con la llegada de los españoles Fabián Ruiz y Carlos Soler y de los portugueses Vitinha y Renato Sanches, que se unirán a Marco Verratti, indiscutible y único superviviente de esa línea.
A ellos se han sumado otros valores jóvenes, como el defensa Mukiele o el atacante Ekitike, de los que no se prevé un impacto inmediato en el club.