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Cuti Romero será baja hasta año nuevo en Tottenham

Tottenham Hotspur le ganaba 2-0 a Chelsea, por la fecha Nº15 de la Premier League, pero la alegría se terminó temprano tras una nueva lesión de Cristian Romero. El defensor fue reemplazado rápidamente, encendiendo las alarmas tanto en su club como en la Selección Argentina. Al final, tras la salida del argentino, Chelsea remontó y ganó 4-3 en un partidazo, gracias a un golazo de Enzo Fernández.

Ahora se conoció que estará de baja como mínimo hasta año nuevo por la lesión que sufrió en la derrota el Chelsea.

El central argentino se tuvo que marchar a los quince minutos de partido con un problema muscular y Ange Postecoglou, su técnico, no cree que pueda volver a contar con él hasta después de fin de año.

"Van de Ven (que también se lesionó contra el Chelsea) y Romero están avanzando y creo que ambos estarán disponible para año nuevo", aseguró Postecoglou antes de enfrentarse al Manchester United en los cuartos de final de la FA Cup.

Sin Romero ni Van de Ven, centrales titulares del Tottenham, Postecoglou ha tenido que recurrir a Radu Dragusin, tercer central del equipo, y a Ben Davies y al joven Archie Gray.

La lesión de Cuti Romero en Tottenham preocupa a Argentina

La salida temprana de Cuti Romero no solo afecta al Tottenham, que pierde a su líder defensivo, sino que también preocupa a la Selección Argentina, ya que el defensor es una pieza clave en el esquema de Lionel Scaloni. Habrá que esperar las evaluaciones médicas para determinar el tiempo de recuperación y si podrá estar disponible para los próximos compromisos internacionales.

La preocupación no es tanto por el calendario, Argentina recién volvería a jugar en marzo de 2025, ante Uruguay y Brasil por Eliminatorias. Pero si por la forma física de un jugador clave en el funcionamiento defensivo del campeón del mundo.

Cuti Romero dejó el campo con claros gestos de frustración tras otra lesión que lo aleja de las canchas. La situación del cordobés deja en evidencia la fragilidad de su estado físico actual, una preocupación que se suma al reto de Tottenham por mantenerse competitivo en una Premier League que no da respiro.