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Los récords no son una motivación para Liverpool y otra derrota, esta vez en Arsenal, lo demuestra

Jürgen Klopp tenía razón: los récords no inspiran a Liverpool. En cambio, una sensación de vergüenza casi lo hace luego de que Liverpool inusitadamente le regalara a Arsenal sus dos goles en el primer tiempo. Sin embargo, no logró remontar lo suficiente y esta derrota por 2-1 lo deja sin chances de superar el récord de 100 puntos de Manchester City esta temporada.

Nadie debería ser demasiado duro con Liverpool tras su conquista del título de la Premier League, pero el hiato por el coronavirus ha prolongado la sensación de fatalidad que le ha generado resistencia para levantarse en este cierre de campaña. Con la carrera ganada hace tiempo y con nada por qué jugar más allá de hitos estadísticos, Liverpool se ha movilizado hacia la línea de meta a su propio ritmo, comprensiblemente incapaz de replicar la intensidad que le dio semejante ventaja sobre el resto en primer lugar.

Aunque respondió a la paliza de City con triunfos consecutivos sobre Aston Villa y Brighton, el empate a un gol del sábado pasado en Burnley y ahora esta derrota en el Emirates Stadium marcan la primera vez que han perdido puntos desde una posición ganadora en toda la temporada. Y ellos mismos se hicieron un daño irreparable cometiendo precisamente el tipo de errores que evitaron cometer durante todo el año para levantar su primera corona en 30 años en la primera división.

Klopp intentó marcar el tono correcto antes del puntapié inicial. Tras parar el mejor equipo disponible, se pasó la entrada en calor mirando a Arsenal hacer sus ejercicios previos al partido con su típica aplicación. Hubo un intercambio de ideas con su cuerpo técnico cuando observaron que estaban haciendo trabajar a los cinco del fondo de Arsenal, y parecía que el servicio normal se había restablecido cuando Sadio Mané puso al equipo visitante arriba a los 20 minutos.

Se podía oír a Mikel Arteta dirigiendo a sus jugadores jugada a jugada, en marcado contraste con el silencio relativo de Klopp -- señal de un equipo aprendiendo su oficio y otro dominándolo. Sin embargo, los Gunners se arremangaron, con Reiss Nelson, Nicolas Pépé y Alexandre Lacazette encomendados a presionar y forzar precisamente el tipo de errores que los defensores de Arsenal habían cometido durante su derrota en Tottenham cuatro días antes.

Klopp parecía completamente desconcertado por el error tan poco característico de Virgil van Dijk que le regaló la pelota a Nelson, quien asistió a Lacazette para el gol del empate. Se quedó literalmente con la boca abierta ante el error de Alisson en el minuto 44, cuando le pasó la pelota directo a Lacazette, quien devolvió el favor para que Nelson pusiera al equipo local en ventaja.

Entró corriendo al túnel en el entretiempo e hizo salir a sus jugadores temprano para el segundo tiempo, sin cambios. Respondieron al llamado de atención con gran perseverancia en busca del empate. Mané, Mohamed Salah y Trent Alexander-Arnold amenazaron en un cierre frenético, pero la incisión característica de Liverpool estuvo ausente, una combinación de su propia flojera y la determinación de Arsenal.

"Estoy decepcionado con el resultado, por supuesto", dijo Klopp. "OK, durante gran parte de la performance fue uno de los mejores partidos que hicimos aquí, pero cuando cometes estos errores, no puedes ganar un partido en la Premier League o necesitas mucha suerte para terminar con el triunfo. Hoy no tuvimos esa suerte. Los errores fueron muy serios y es por eso que hemos perdido. Arrancamos excepcionalmente bien. No puedo recordar una actuación tan dominante contra Arsenal desde que estoy aquí".

"Merecíamos estar 1-0 arriba y luego nos tomamos un descanso. Somos seres humanos y creo que evaluamos mal la situación. Teníamos el juego controlado, pero en estos momentos, alrededor de tu propio arco, ceder estas pelotas, sin dudas no ayuda. En el segundo tiempo, estuvimos al mando. Pero el resultado muestra lo que es y lo aceptamos”.

Arsenal aprovecho su suerte, pero de todas maneras esta fue una victoria importante para Arteta, quien más de una vez ha dicho que sólo quiere jugadores que estén listos para subirse al bote. Este fue un claro indicio de que el bote podría tener un destino excitante si aquellos que están a bordo son capaces de replicar con regularidad este nivel de compromiso, disciplina y concentración.

En el largo plazo, Arteta quiere implementar un juego basado en la posesión del que Arsenal produjo flashes en derrotas contra Tottenham, pero su habilidad para conseguir resultados ha sido cuestionada durante años y por lo tanto performances como estas son un paso genuino hacia la mayor resiliencia que el español está tratando de inculcar.

"Forzamos errores, ellos los cometieron y eso hizo la diferencia”, comentó Arteta. "Hablamos mucho acerca de cómo ganamos los partidos en este momento con la diferencia de los dos equipos y cómo necesitamos jugar para conseguir los puntos. Estoy contento porque ellos lo pueden hacer. A veces el enfoque y la confianza hace que todos estén con los ánimos arriba y con el nivel de atención adecuado”.

La pregunta sigue siendo si es que lo pueden hacer sobre una base regular y cuando más importe, algo que Liverpool ha demostrado una y otra vez, aunque los números ahora no lo reflejen. No solo pueden empatar el record de City de 32 victorias en una temporada de liga. Después de que City superó a Bournemouth más temprano, Liverpool ahora está a un punto del margen de 19 con el que el equipo Pep Guardiola ganó el título en 2017-18.

"Quiero los puntos que podemos conseguir", dijo Klopp. "Veremos cómo termina todo al final de la temporada. No puedo sacar una conclusión negativa de algo realmente positivo – convertirnos en campeones, haber sumado 93 puntos tan temprano en la temporada. No soy la clase de persona que ahora sacará algo negativo de eso porque ya no podemos sumar los 100 puntos. Conseguimos los puntos que merecemos y veremos cuántos serán al final. Por el momento son 93, con dos partidos difíciles por delante. Estos muchachos han hecho una temporada excepcional y nadie les podrá quitar eso”.