Las Águilas pusieron la estrella 14, gracias a los goles de Julián Quiñones, Richard Sánchez y Jonathan Rodríguez
El título del Apertura 2023 se pintó azulcrema. La estrella 14 para el América se bordó con el sufrimiento y el dramatismo de un combate ante la dinastía de los Tigres, pero que al final un gol descencadenó el triunfo de las Águilas 3-0 en el partido de vuelta (global de 4-1).
El América se consagró campeón de la Liga MX. El plan de André Jardine se fraguó con todo su arsenal, compuesto por Diego Valdés, Henry Martín, Jonathan Rodríguez y Julián Quiñones, quien se convirtió en el héroe al marcar en tiempo extra el tanto que hizo vibrar al Coloso más grande del país.
La épica se fue construyendo poco a poco, con ambas escuadras sin ceder un centímetro, con un juego que alcanzó a tomar tintes de aburrimiento para los aficionados y que solo las acciones de Nahuel Guzmán y Luis Ángel Malagón fueron capaces de levantar a ambas aficiones con sus atajadas.
América intentó llegar, pero Tigres jugó a su ritmo, sin presiones, cediendo la iniciativa y bajando las cortinas en su primer cuarto del campo para impedir los embates. Cuando las Águilas pisaban el acelerador, generaban ligero peligro, como el tiro de Diego Valdés de primera intención que rechazó la zaga.
Los emplumados se pusieron nerviosos con el tiro de Carioca que se estrelló en el larguero y los obligó a contestar dicha afrenta con una acción individual de Álvaro Fidalgo, quien entró hasta línea de fondo, encaró y remató. La pelota fue desviada por Nahuel, pero el estadio despertó y los azulcrema se contagiaron.
Una nueva historia se escribió al minuto 80 ,con la tarjeta roja a Raymundo Fulgencio por un manotazo en el rostro de Julián Quiñones, quien quedó tendido en el césped.
La superioridad numérica y el dominio del América quedaron de manifiesto apenas en los primeros instantes del primer tiempo extra, con un centro de Álvaro Fidalgo que pasó dramáticamente por el área y Quiñones remató de primera instancia, Nahuel rechazó, pero en el contraremata empujó el balón a la red.
Un gol, el grito de 74 mil aficionados rompió el nerviosismo y el sueño de ganar la liga estaban al alcance.
La superioridad del América y la urgencia de los felinos por empatar llevó a Nahuel Guzmán a jugar adelantado, un error que pagó caro después de la falta sobre Quiñones y recibir la expulsión.
El Azteca fue una fiesta. La superioridad de dos hombres fue la sentencia para el rival, pues antes de finalizar el primer tiempo extra Richard Sánchez apareció. El paraguayo estuvo en el torneo como actor secundario, pero para la final apareció en escena para darle a los suyos el segundo tanto que sellaba el título de liga con un tiro potente y preciso para aumentar la ventaja.
La fiesta aún no terminaba. Con gritos de “olé, olé, olé, campeón, campeón”. La afición quería más y Jonathan Rodríguez les dio lo que querían. El delantero apareció, remató y puso la goleada para el título.
América desplegó sus alas después de cinco años de sequía y presume su grandeza y soberbia con su décima cuarta estrella consagrándose como el equipo más ganador de la Liga MX.