Se viene la etapa de definición más apasionante de este tipo de torneos. El "Rubicón", como bien lo denominó Alejandro Sabella en Brasil 2014. Los cuartos de final no son solo la instancia que agrupa a los ocho mejores, sino una especie de prueba mental, futbolística y de carácter. Se puede llegar hasta aquí sin hacer grandes méritos, pero solo los superan aquellos que de verdad pueden alcanzar la gloria. Los cuatro sobrevivientes saben que después de avanzar un paso más solo el título será suficiente para ellos en este Mundial de Clubes.
Los partidos se disputarán entre el viernes 4 y el sábado 5. Hay cinco equipos europeos, dos sudamericanos (brasileños) y uno asiático (saudí). A primera vista parece haber menos representantes de Europa de lo imaginado. Y es cierto, este fue un campeonato en el que los equipos de la UEFA no terminaron de sacar la ventaja esperada. Esa es la sensación que queda, más allá de partidos y situaciones puntuales. Una de las incógnitas de estos cuartos es si al fin podrán demostrar su mayor calidad.
¿Qué esperar de cada partido de cuartos de final del Mundial de clubes?
PSG vs. Bayern Munich
Podría ser una final de UEFA Champions League. De hecho, lo fue en 2020, cuando en medio de la pandemia el equipo bávaro le ganó al conjunto de Neymar y Kylian Mbappé en Lisboa. Se encuentran en esta instancia porque Bayern no pudo ganar su grupo. Es una mala noticia para ambos, porque en las previsiones solo podían encontrarse en la final del 13 de julio en New Jersey.
El desafío será mayúsculo para ambos. Son, tal vez, los principales favoritos a levantar el trofeo, por jerarquía y actualidad. PSG viene con el envión de haber conseguido el triplete. Lo logró porque alcanzó el pico de rendimiento físico y futbolístico en la parte final de la temporada. Esa diferencia con otros rivales se vio en la final de al Champions. Por su parte, Bayern se tomó este torneo muy en serio y desde que aseguró el título de la Bundesliga se preparó para ganarlo.
En Atlanta se espera un partidazo. Muy parejo, que inhabilita a dar un pronóstico serio. Son dos estilos diferentes: mientas el equipo de Luis Enrique crece desde la posesión de la pelota, la dinámica para intercambiar posiciones y el talento de sus mediocampistas y atacantes, el conjunto de Vincent Kompany puede lastimar en cualquier momento por su juego directo y la enorme capacidad goleadora de Harry Kane.
Palmeiras vs. Chelsea
El equipo brasileño fue uno de los más sólidos de la Copa del Mundo de Clubes y se plantará frente a uno de los principales candidatos. En Filadelfia se espera otro duelo imperdible y equilibrado, el único entre Sudamérica y Europa de los cuartos de final. Ese ingrediente hace crecer aún más el interés.
Palmeiras ganó su zona con autoridad y solo mostró algunas dudas ante Inter Miami, aunque reaccionó a tiempo y también sacó temperamento cuando lo necesitó. Es el club más regular del continente en el último lustro y trasladó ese funcionamiento al Mundial. El trabajo defensivo es lo que sostiene sus ilusiones. Sabe muy bien jugar estos partidos de eliminación directa y su espíritu "copero" puede ser fundamental.
Por su parte, Chelsea tiene futbolistas de primer nivel y muy buena actualidad en todas las líneas y se apoya en esa calidad. Esta temporada ganó una copa internacional (la Conference League) y a pesar de que la dificultad es muy diferente, esa gimnasia será importante. Contra Palmeiras debe hacer pesar el talento de sus jugadores en el uno contra uno. Además, está avisado: sufrió un revés contra Flamengo y su preparación para este encuentro debe tener en cuenta ese antecedente.
Fluminense vs. Al Hilal
Sin dudas, el partido más sorprendente de esta fase. Quien salga vencedor del duelo de Orlando se tansformará en la gran revelación del Mundial. Ambos tienen argumentos futbolísticos para soñar, pero se apoyarán en su gran capital: el envión anímico y el estado de gracia de algunos de sus jugadores.
Al Hilal dio la principal sorpresa del Mundial. En octavos, superó a Manchester City en uno de los partidos más espectaculares del año. No solo dio vuelta el marcador, sino que nunca jugó a refugiarse y siempre fue al frente contra el conjunto de Josep Guardiola. Representa a Arabia Saudita, pero es un equipo europeo. Su entrenador Simone Inzaghi llegó hace pocos días y ya le imprimió su carácter competitivo. De la mano de Sergej Milinković-Savić, llega deshinibido y con serias posibilidades de vencer.
Fluminense, en tanto, se aprovechó de un Inter extenuado y le ganó con absoluta autoridad y sin dejar dudas. Antes, había tenido una gran actuación contra Borussia Dortmund. El cuadro carioca no tuvo un gran semestre pero encontró funcionamiento justo en estos días. Y eso vale oro en un Mundial. Con Renato Gaúcho, un técnico muy inteligente y copero, Thiago Silva, líder total, y Jhon Arias, uno de los mejores futbolistas del torneo, está en condiciones de pelear contra cualquiera.
Real Madrid vs. Borussia Dortmund
Otra de las recientes finales de la Champions League que se reeditará en cuartos del Mundial. Se enfrentaron en la definición del año pasado, en la que el conjunto español ganó su 15ta orejona. Ahora, ambos renovados, se viene una revancha muy atractiva.
Real Madrid todavía no expuso su mejor juego. Y es lógico. No solo estamos al final de la temporada, sino que Xabi Alonso se hizo cargo de la dirección técnica días antes del comienzo del Mundial y está conociendo a sus jugadores en medio de la competencia. Sin embargo, sí se vieron algunas novedades, como la aparición de Gonzalo García, quien hizo su irrupción ante la lesión de Mbappé y ha demostrado temperamento para hacerse cargo de la responsabilidad.
Por nombre, historia y peso propio, es el principal favorito. Alguna vez ganó la primera Copa de Europa, así que sería natural que ganara también el primer Mundial de 32 clubes.
Enfrente estará Dortmund, que contra Monterrey mostró dos facetas bien distintas. En ataque fue un equipo fresco, con dinámica y variantes. Pero en defensa dejó muchas dudas en el retroceso. Está invicto en el torneo, pero jugará por primera vez ante un rival europeo.