De repente, el epicentro de la información sobre la Selección Argentina estuvo a 14.000 kilómetros de Qatar. Sí, una paradoja. Todos los ojos estuvieron puestos en Buenos Aires, donde Thiago Almada y Ángel Correa se tomaron el avión rumbo a Doha en un clima de euforia.
En la madrugada del viernes, el aeropuerto internacional de Ezeiza se asemejó bastante a una cancha de fútbol para despedir a los reemplazantes de Nicolás González y Joaquín Correa en la lista definitiva para la Copa del Mundo 2022.
“Es todo muy lindo cómo se vive el fútbol argentino”, arrancó Almada en referencia al ambiente y el apoyo recibido. “Estoy muy contento. Quiero saludar al Tucu (Correa), que está viviendo un momento duro. No se lo deseo a nadie. Espero que se recupere pronto”, agregó el talentoso mediocampista ofensivo de Atlanta United.
Por su parte, Angelito Correa dialogó con la prensa en Rosario, antes de viajar a Buenos Aires: “Me tomó por sorpresa y ahora me voy con una ilusión enorme. Me avisaron hace un par de horas, estaba con mi familia, con mi abuela, mis amigos, mis hermanas, mis sobrinos, mis hijas. Scaloni me dijo que me están esperando con la mejor. Estoy feliz, ojalá se nos dé”.
Los flamantes citados de la Albiceleste viajan rumbo a la sede del Mundial vía San Pablo y en unas horas se sumarán al plantel en la Universidad de Qatar, a la espera del debut del próximo 22 de noviembre ante Arabia Saudita, a las 07:00 de Argentina.