Perú no pudo romper el cerrojo de Paraguay en el Estadio Monumental y se fue sin anotar goles en su penúltimo amistoso antes de su debut en la Copa América.
Tal cual avisó Jorge Fossati, ante la Albirroja, apostó por el equipo base que piensa de cara a la Copa América, sin los sentidos Christian Cueva y Bryan Reyna.
La gran novedad del once fue José Rivera, que tiene una prueba de fuego en el Monumental, donde convirtió la mayoría de sus goles en el presente año. Sin embargo, el reto le quedó grande y no pesó en ataque, ni individual ni colectivamente.
Fossati volvió a apostar por Wilder Cartagena como interior derecho y si bien le dio equilibrio a la volante, ofensivamente le dio muy poco a Perú. En la banda izquierda, Marcos López pesó muy poco, más allá de un par de asociaciones.
¿Quiénes aprobaron?
Principalmente Carlos Zambrano, que impuso su experiencia y jerarquía en defensa. No le dio opción a sus rivales y fue un líder en la zaga. Renato Tapia impuso orden en el mediocampo y se confirmó como el bastión sobre el que pueden apoyarse los ataques nacionales.
Piero Quispe tuvo personalidad para pedirle siempre e intentar cosas distintas, más allá del resultado final. Andy Polo se mostró muy incisivo en ataque y fue un dolor de cabeza para sus rivales, pese a que no estuvo preciso en el último pase.
André Carrillo, Paolo Guerrero, Edison Flores y Luis Advíncula demostraron que pueden seguir aportándole mucho a Perú, lo que podría abrir la puerta a mayores oportunidades ante El Salvador, en el último amistoso antes de la Copa América.