A un año del inicio del Mundial, la Selección Colombia está en puestos de clasificación directa a la Copa del Mundo de Qatar 2022 en unas Eliminatorias muy ajustada. Reinaldo Rueda acercó a James Rodríguez y Radamel Falcao García para ir por el objetivo. Las lesiones y la poca competitividad de la liga catarí juegan en contra.
Los reconoce como capitanes. Aunque participaron poco de su proceso, el DT recurre a su experiencia para marcar el destino de un equipo que sobrevive pese a que suma con empates. Diezmados, sin la regularidad que exige un torneo extenuante, el valor de tener a dos símbolos de Selección resulta positivo. Los necesita.
FALCAO EN UN DUELO APARTE CON LAS LESIONES
Aceptó el reto de volver a una liga exigente en un equipo modesto. A última hora fichó por Rayo Vallecano. El club le garantiza visibilidad y continuidad para mantenerse con perfil de Selección.
Lo consiguió. Suma cinco goles en ocho partidos. Su prestigio está intacto. Rueda lo citó para seis compromisos en los que disputó 205 minutos. Para esta última doble jornada salió por una rotura en el aductor mayor del muslo derecho.
Las lesiones conspiran por su continuidad. Una compañía incómoda que parece inevitable hasta noviembre 2022. En la forma que traía antes de esta molestia física, es candidato a jugar su segunda Copa del Mundo.
LA LIGA DE QATAR OFRECE POCO PARA JAMES
La titularidad que reclamaba en Everton la encontró en Al Rayyan. Eso sí, en una liga menor en la que le dan patadas sin piedad, la competencia es mínima y la exigencia limitada.
James busca el nivel que perdió en un inicio de temporada problemático. Con cuatro encuentros y un gol en Qatar, Jugó 90 minutos en los dos partidos de su regreso a la Selección. La técnica está a salvo, su influencia futbolística en construcción.
¿Resistirá un año más en esas condiciones? Además el torneo termina en marzo y está pendiente de una sanción que lo podría dejar sin jugar por lo que resta de 2021. Cabeza fría para decidir.