El grito discriminatorio apareció en la final de Concacaf Nations League, luego de la ventaja de dos goles de Estados Unidos

El partido entre México y Estados Unidos se detuvo al minuto 87, debido a que se escuchó el grito discriminatorio, por tercera ocasión, en la final de la Nations League de la Concacaf, que se disputó en Arlington, Texas.

El árbitro canadiense Drew Fischer detuvo el juego en la tercera ocasión que se escuchó el grito discriminatorio, en un despeje del arquero Matt Turner.

En una primera instancia, el sonido local pidió a la afición que asistió al estadio de Arlington, Texas, evitar poner en práctica el grito discriminatorio, debido a que no siguieron las indicaciones, se detuvo un minuto el partido.

En el momento que se detuvo el partido, México iba perdiendo por 2-0 contra Estados Unidos, lo que provocó la molestia de la afición en el estadio de los Dallas Cowboys. A pesar de que el juego se suspendió, y las llamadas de atención, los asistentes continuaron haciendo el grito que es castigado por la FIFA y la Concacaf.

México y la Concacaf, desde hace varios meses, han puesto en práctica protocolos para evitar que se siga escuchando el grito discriminatorio, no han funcionado, debido a que sigue apareciendo la expresión cada vez que el Tricolor va perdiendo un partido.

Juego se suspende por segunda ocasión

A pesar que faltaban algunos segundos para que terminara el juego entre México y Estados Unidos, el árbitro Drew Fischer volvió a detener el juego, por el grito discriminatorio, ya que se continuaba escuchando en cada despeje del portero Matt Turner.

El árbitro, sin importar los reclamos de los jugadores de las barras y las estrellas, volvió a reiniciar el juego por segunda ocasión.

México intentó, al final, buscar al menos un gol para acercarse a los Estados Unidos y revivir en la lucha por el título de la Concacaf. El juego se acabó hasta los 98 minutos.