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Joaquín Piquerez se despidió este viernes por la noche del Club Atlético Peñarol. Con una carta publicada en sus redes sociales, el lateral izquierdo valoró lo vivido desde que se incorporó al equipo carbonero en febrero del 2020 y aseguró que más adelante podrá tener la posibilidad de regresar al Manya. “Carboneros, me despido de ustedes con la felicidad de haber cumplido un sueño que tenía desde chico: vestir los colores más lindos. Fue muy importante sentir el apoyo de todos ustedes durante este año y medio. Estando en el club, confirmé todo lo que veía desde afuera como hincha”, comenzó su publicación el jugador que continuará su carrera en el exterior (seguramente firmará contrato con Palmeiras de Brasil en las próximas jornadas). Tras participar del Torneo Preolímpico sub 23 con la Selección Uruguaya, el futbolista había comenzado a entrenar en Peñarol el 12 de febrero del 2020. Piquerez se había formado en Defensor Sporting y había tenido un gran segundo semestre del 2019 con River Plate jugando como carrilero por izquierda. Nacido el 24 de agosto de 1998, Piquerez comenzó siendo suplente en la temporada 2020, sin definirse si su mejor posición era de lateral o de volante externo. Sin embargo, en la reanudación de la actividad oficial en agosto (en marzo se suspendió el fútbol uruguayo ante la llegada del coronavirus al país), el futbolista fue titular como lateral izquierdo en el clásico jugado ante Nacional por el Apertura. El argentino Gabriel Rojas había regresado a San Lorenzo en junio, y Piquerez aprovechó la oportunidad y paulatinamente fue mejorando su rendimiento, perfeccionándose en la marca sin dejar de aportar en ataque con su particular potencia física. El futbolista se ganó el puesto con Diego Forlán como entrenador, se mantuvo en el once con la llegada de Mario Saralegui y en este 2021 se convirtió en una pieza clave en el esquema de Mauricio Larriera. Piquerez remarcó en su carta: “Cada vez que entré a la cancha para representar a Peñarol, dejé todo de mí. Desde el primer día asumí este desafío con la seriedad y el compromiso que me caracteriza, al igual que lo haré en mi próximo equipo”. Y se lamentó de una particularidad: “Me queda la espina de no haber podido jugar con ustedes alentando desde la tribuna, pero estoy seguro que más adelante se dará la oportunidad”. Curiosamente, antes de constatarse la llegada del COVID-19 a Uruguay (viernes 13 de marzo del 2020), Piquerez únicamente había jugado dos partidos con Peñarol, y ambos en condición de visitante. Ante Cerro y frente a Danubio, por las fechas 1 y 3 del Apertura, el lateral estuvo en el banco de suplentes y no ingresó en ninguno de esos dos encuentros disputados en el Campeón del Siglo. Tampoco tuvo minutos el martes 11 de marzo en el choque ante Jorge Wilstermann por la Copa Libertadores, el último que Peñarol jugó en su escenario con público en las tribunas. Los dos partidos que Piquerez jugó antes de la suspensión del fútbol local (que luego se reanudó, pero a puertas cerradas) fueron ante Athletico Paranaense en Brasil por la Libertadores, jugando de titular como volante externo, y entrando en los 19 minutos finales ante Defensor Sporting en el estadio Luis Franzini por la segunda fecha del Apertura. La última imagen de este futbolista con la camiseta aurinegra es su festejo en el Campeón del Siglo tras eliminar a Nacional en los octavos de final de la Copa CONMEBOL Sudamericana el pasado jueves 22 de julio. “Siempre dejaré la puerta abierta para volver”, sentenció Piquerez en su carta pública dirigida a la hinchada mirasol.
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