Michael Jordan es el modelo a seguir para muchos atletas. Su dominio en la duela durante una de las épocas más competitivas del basquetbol profesional y su fortaleza mental son incomparables.
Y entre dichos atletas que tienen a Jordan como modelo se encuentra Brandon Moreno, el primer peleador nacido en México en coronarse campeón del UFC.
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Moreno llegó a la semana de la pelea de UFC 283 (10 p.m. ET, ESPN+ PPV) portando unas Jordan 1 Chicago Lost and Found, un gesto más en lo que el tijuanense llamó “el último baile”, su último campamento para enfrentar al rival que marcó su carrera, el brasileño Deiveson Figueiredo.
“El Último Baile” es el documental que retrata una de las campañas más admirables de Jordan, la del sexto campeonato que también marcó el fin de la dinastía de sus Chicago Bulls.
Y aunque el retiro de Brandon parece lejano, es hora de cerrar el capítulo Figueiredo, con todo lo bueno - el dulce momento de portar el cinturón por primera vez en UFC 263 -, lo malo - la caída en UFC 270 - y lo feo - el rompimiento definitivo de su amistad con Henry Cejudo.
Desde noviembre del 2020, cuando recibió la llamada del UFC para su primera pelea titular, horas después de haber ganado en UFC 255, Moreno tiene en su mente a Deiveson, el entonces campeón, para quien ya ha realizado cinco campamentos, incluido el del verano del 2022, cuando terminó enfrentando a Kai Kara-France en UFC 277 por el cinturón interino.
“Definitivamente ya no quiero verlo, no es una persona agradable, a mí no me ha enseñado honor, ni respeto. Es cansado, en la primera pelea, en 2020 fue corto aviso para los dos, después de ahí los campamentos han sido muy largos para él, entre la primera y la segunda fueron mis meses de tenerlo en la cabeza, es estresante. La pelea con Kai me ayudó mucho, el solo hecho de haber cambiado la estrategia, un tipo nuevo, un plan de juego diferente”, confesó Brandon en la primera edición de UFC: Camino al Octágono de ESPN Deportes.
-Stream Figueiredo-Moreno 1 (UFC 256)
-Stream Moreno-Figueiredo 2 (UFC 263)
-Stream Figueiredo-Moreno 3 (UFC 270)
En UFC 270 en enero del 2022 fue el punto más tenso de la rivalidad, con el ruido de Cejudo, quien impulsó a Moreno en su llegada al UFC mucho antes de estar en el campamento del brasileño, además de todos los comentarios que hizo el ex campeón gallo en su contra, y de la presión de pelear “en casa”, a unas cuantas millas de Tijuana. Hoy Moreno reconoce que sí lo afectó en lo mental, pero ya no se sorprende con nada; mantiene el temple en los careos promocionales, mientras que el ‘Dios de la Guerra’ sigue buscando cómo meterse en su cabeza.
A los 29 años, Moreno piensa que la tetralogía solo abre la puerta de su legado.
“Estoy seguro de que cuando gane esa cuarta pelea el 21 de enero estaré listo para hacer cosas más grandes todavía”, agregó.
De víctima a estrella
Cuando Moreno tomó la primera pelea de campeonato en UFC 256, el entonces campeón Figueiredo era favorito 5-1 para retener el cinturón. Pocos expertos se atrevían a darle una ventana de oportunidad al mexicano.
Deiveson venía de someter en el primer round a Alex Pérez y de noquear dos veces a Joseph Benavidez, solidificándose como un monarca aterrador en una división etiquetada como falta de poder.
Hoy la situación ha cambiado de forma radical. En lo deportivo están muy parejos, incluso Moreno se ve mucho más completo y tiene la ventaja, ya que finalizó en la segunda parte.
Además se ha convertido en una de las estrellas más grandes del UFC, que cada vez lo aprovecha más para representar la marca, no solo en el mercado latino, sino a través del mundo en nuevos mercados como Londres, París y Madrid.
Moreno tiene que coordinar sus viajes, las narraciones y el entrenamiento en un nivel muy alto de exigencia.
“Estoy llevando mi cuerpo al límite, me siento incómodo descansando. No me gusta quedarme en la casa sin hacer nada, viendo la tele, obviamente administro mi tiempo, por que también soy papá y también soy esposo. Trato de pasar tiempo con mis hijas, ir por ellas a la escuela y más cosas así, pero no voy a negarte que a veces soy lo que queda de Brandon Moreno”, reconoció el ‘Bebé Asesino’.
Hoy, el campeón interino tiene casi el triple de seguidores alrededor del mundo que el campeón absoluto. La clave es enfrentarse a él como superior y no dejarle ningún espacio.
“Si lo respetas, lo dejas hacer su pelea y tomar aire, y te metes en problemas. Ponle presión, dale con todo. Yo tengo una buena resistencia, buena quijada, muchos otros no hubieran aguantado el daño. En la tercera lo respete mucho, lo dejé recuperarse”, considera.
El verdadero cambio
La pelea en Anaheim fue la última de Moreno en el Entram Gym de Tijuana. Ahora tiene su base en Las Vegas con un equipo de gente cercana como sus compañeros Masio Fullen y Marcelo Rojo, además de sus entrenadores Pedro Joya, Héctor Vásquez y Jorge Capetillo.
Pero Moreno encontró en James Krause a la mente detrás de su estrategia. Mostraron una buena química en UFC 277 en la única pelea en la que el Coach de Glory MMA pudo estar con él.
En diciembre, Krause fue suspendido por el UFC debido a una investigación sobre una pelea arreglada y apuestas ilegales. Tiene prohibido entrenar o estar en la esquina de los peladores del UFC.
La sacudida fue dura, ya que Moreno lo consideraba un amigo. Sin embargo, tuvo que ajustar a medio campamento.
“Yo volteo la página muy rápido, no me quedo en un solo momento, trato de avanzar y ver lo que sigue. No voy a negar que no me abrumó un poco toda esta situación con James, pero una vez que dije, voy a ver que se tiene que hacer para sacar adelante este campamento, lo hice. Se unió Sayif Saud, y la primera semana fue complicada porque él tiene su método. Pero el plan y lo que él pensaba para el combate era muy similar. Las últimas semanas del campamento salieron muy bien”, detalló.
Saud es un coach de gran reconocimiento por su trabajo en Fortis MMA con más de una docena de peleadores en el UFC, entre ellos Fernando García, el peleador de El Paso que cuenta con una mano derecha poderosa para simular a Deiveson y ayudó en los entrenamientos.
A pesar de los dos cambios de campamento en 12 meses, para el tijuanense basta con la experiencia de la cerrada derrota en UFC 270 para entender los ajustes necesarios.
“La esencia del combate es la misma, sabemos lo que yo traigo a la mesa. Soy un peleador que le gusta poner presión que tengo buen cardiovascular, que va para enfrente. Sabemos que él tiene esa mano derecha que es muy peligrosa, pero en la segunda pelea me sorprendió con la forma en la que administró su cardio y explotaba cuando era necesario. Esas son cosas que salen una sola vez”, explicó.
Figueiredo vs. Moreno es la primera tetralogía en la historia de las peleas de campeonato en el UFC, además el brasileño será el primero en enfrentar cuatro veces de forma consecutiva al mismo rival.
Ambos entrarán al octágono, deseando que sea “el último baile”.