Luego de la severa fractura en tibia y peroné que sufrió Paul George el viernes durante un partido de exhibición con el Team USA, Mark Cuban, dueño de los Dallas Mavericks, ha retomado su insistencia para que la NBA y sus jugadores organicen su propia competencia cada cuatro años, por separado del organismo rector del deporte.
Cuban, quien durante mucho tiempo ha sido el crítico más severo de la NBA contra el básquetbol internacional, de nuevo ha cuestionado el por qué los equipos de la liga permiten que los jugadores compitan con sus seleccionados nacionales, mientras absorben gran parte del riesgo financiero en caso de una lesión.
"Mis pensamientos están con Paul", dijo Cuban a ESPN.com. "Me siento mal por él".
Luego, Cuban reiteró su longeva crítica al acuerdo de la NBA con FIBA, que estipula que los jugadores pueden rehusarse para acudir a la convocatoria de sus selecciones nacionales solamente en caso de una "preocupación médica razonable". Los San Antonio Spurs invocaron esta cláusula durante la semana para prevenir que Manu Ginobili represente a Argentina en la Copa del Mundo de la FIBA, gracias a los efectos de una fractura por estrés.
"El COI (Comité Olímpico Internacional) está jugando con la NBA. El COI es una organización llena de corrupción, hasta el punto de que un integrante fue acusado de intentar arreglar un evento olímpico en Salt Lake. El COI gana billones de dólares. Ganan demasiado y hacen ver a Tony Soprano como un santo.
"Los profesionales en múltiples deportes son lo suficientemente inteligentes para no jugar cuando son elegibles para la agencia libre. Pero los equipos toman un gran riesgo financiero, para que los integrantes del COI se llenen los bolsillos.
"El mayor truco que jamás se haya efectuado se dio cuando el COI convenció al mundo de que los Juegos Olímpicos son acerca del patriotismo y orgullo nacional, en lugar de dinero. Los jugadores y dueños deberían juntarse y crear nuestra propia Copa del Mundo de Básquetbol".
Cuban no es el único de los dueños de la NBA que desean que sus jugadores evitaran las competencias internacionales durante el verano, pero él ha estado en una isla virtual en términos de su disposición para hacer pública esa posición.
En repetidas ocasiones, él ha protestado por las desigualdades de un sistema que hace que la NBA tenga muy pocas ganancias derivas de competencias como el torneo olímpico de básquetbol o la Copa del Mundo FIBA de este verano, mientras que absorben todo el riesgo financiero si las estrellas de la NBA se lesionan.
Pero los Indiana Pacers se han negado a atacar, pese a potencialmente perder a George por toda la temporada, la primera de un contrato por cinco años y $92 millones que entra en vigencia esta próxima campaña.
En un comunicado enviado el sábado, Larry Bird, presidente de los Pacers, dijo: "Apoyamos a USA Basketball y creemos en los objetivos de la NBA para crecer la exposición de nuestro deporte, nuestros equipos y nuestros jugadores. Esto es una lesión desafortunada que ocurrió en un escenario muy visible, pero que pudo haber ocurrido en cualquier momento y en cualquier lugar".
Cuban ha propuesto esto durante años, tras ver a Dirk Nowitzki -el rostro de la franquicia de los Mavericks- desgastar su cuerpo verano tras verano, echándose al hombro a un equipo alemán sin el personal suficiente para apoyar.
En enero de 2010, Cuban le dijo a ESPNDallas.com: "Es la personificación de la estupidez el que permitamos que nos usen para que otras compañías ganen muchos millones de dólares. Hay algunos tipos en las sedes del COI diciendo, 'esos pobres tontos, les estamos quitando a sus mejores jugadores sin darles un centavo a cambio'".
Cuban dijo en ese entonces que seguiría "peleando, para poder sacar a nuestras estrellas".
"Lo entiendo desde la perspectiva de Dirk", dijo Cuban entonces. "Nunca debemos poner a nuestros atletas en esa posición. Para algunos deportes, los Juegos Olímpicos son muy importantes. Para el básquetbol, no importa nada. No es que no sean buenos juegos. Al tener condiciones iguales, es divertido vernos jugar contra Argentina y España, pero sería igual de divertido si fueran jugadores de 21 años o menos".