Los Marineros de Seattle anotaron un ramillete de tres carreras en el décimo episodio, para romper un empate de 2-2 frente a Angelinos de Los Ángeles, y de esa forma terminar ganando por marcador final de 5-2, este viernes, en el inicio de una serie de tres desafíos en la lucha por la División Oeste de la Liga Americana, en el estadio de la A Gigante.
Ante los lanzamientos del venezolano Jose Alvarez (0-1, efectividad de 7.36), que terminó como el perdedor, su paisano, Franklin Gutiérrez, quien fue llamado por el manager Scott Servais para batear como emergente, impulsó con un sencillo a Kotel Marte, quien anotaba la carrera del desempate.
Después, vino el bateador designado Nelson Cruz, quien disparó su tercer batazo de cuatro esquinas de la campaña, llevándose por delante a Robinson Canó, para dejar la pizarra final en 5-2.
"Lo importante fue que conseguimos la victoria. El bullpen hizo un buen trabajo y lo que hizo esta noche el equipo, fue extraordinario," destacó Cruz, en entrevista con ESPN Digital.
Luego, el pelotero de Las Matas de Santa Cruz, en la República Dominicana, dijo que el estadio de Anaheim no significaba nada en especial para él:
"No creo que se trate de algo en particular el batear en este estadio, porque uno trata siempre de hacer su trabajo, donde quiera que juegue", dijo el bateador designado, quien ya acumula 3 vuelacercas y 10 carreras remolcadas, en lo que va del año.
"La temporada apenas inicia, pero siempre es importante tener la oportunidad de ganar partidos," aseguró Nelson Cruz.
El abridor de los Angelinos, el derecho Nick Tropeano lanzó durante 5 episodios y un tercio, permitiendo 4 hits y 2 carreras, pero se fue sin decisión.
"En los primeros dos episodios realizó demasiados lanzamientos, dio algunas bases por bolas y fue hasta la segunda vez que enfrentó a la alineación de ellos, que se vió más asentado y nos mantuvo en el juego", dijo Mike Scioscia, el manager de los Angelinos, al referirse a la labor de Tropeano.
El ganador fue el veterano apagafuegos dominicano, Joel Peralta (1-0, efectividad de 2.25), luego de lanzar en el noveno acto, en el que protagonizó un más que interesante duelo, retando a la parte más explosiva del bateo de los aureolados, Mike Trout, Albert Pujols y Kole Calhoun, a quienes logró dominar.
"Es una alineación increíble, porque Trout es un tremendo bateador, lo mismo que Pujols y Kalhoun, quien está teniendo un buen año. Pero, nada, yo traté de salir a lanzar en forma muy agresiva, tirando muchos strikes y logré conseguir buenos resultados".
Los desafiaste abiertamente, poniendo tus lanzamientos en el centro del plato, como jugando con fuego, frente a estos batedores de poder.
"Claro, así fue, porque yo lo que estaba intentando, es que se sintieran tentados a hacer el swing a mis lanzamientos y de esa forma, me puse adelante de ellos en la cuenta y al final, logré un buen resultado".
Peralta también se refirió a la enorme ayuda que tuvo por parte de su receptor, Chris Iannetta, expelotero de los Angelinos, quien conoce a la perfección a los bateadores del equipo del Condado de Orange.
"El estuvo haciendo los llamados correctos, en cuanto a los lanzamientos, para cada bateador," corroboró Peralta, quien reiteró:
"Sí, fue un buen triunfo y nosotros estamos bien contentos por haber podido ganar este partido".
El lanzador abridor por la novena de Seattle fue el japonés Hishashi Iwakuma, quien se mantuvo en la loma durante 8 entradas completas, permitiendo 6 imparables, incluyendo los batazos de vuelta entera de Calhoun y Cron, y no tuvo nada que ver con el desenlace del duelo, que iniciaban ganando los Marineros.
Los visitantes no perdieron el tiempo y en el primer episodio le hicieron dos carreras a Tropeano. Pero en el cierre de la cuarta entrada, el jardinero derecho, Kole Kalhoun, la desapareció por el pabellón del jardín derecho, con las bases desocupadas, luego de que Pujols, quien se fue de 0-4 y llegó a 23 turnos sin lograr hit, bateara para doble matanza.
Y en el próximo capítulo, C.J. Cron, el primera base angelino, no quiso ser menos y también se llevó la barda del bosque derecho, un poco más hacia el centro, que el batazo de Kalhoun.