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Rigo Cervantez, ESPN Digital 8y

Poderío cubano da triunfo al pitcher boricua José De León

El serpentinero José De León debutó el domingo en Grandes Ligas en forma exitosa y, además de ponchar a nueve bateadores para cincelar su primer triunfo con la franela de Dodgers de Los Ángeles, el puertorriqueño contó con el respaldo de dos cubanos: Yasiel Puig y Yasmani Grandal, que dispararon sendos vuelacercas para generar cinco carreras y conducir a la novena de Dave Roberts a vencer 7-4 a los Padres de San Diego en Chávez Ravine.

Los de azul lograron dominar a sus vecinos sureños en una serie de tres desafíos y al mismo tiempo, con su triunfo número 76 de la campaña, se mantienen al frente en la División Oeste de la Liga Nacional, aumentando a tres juegos su distancia de los Gigantes de San Francisco.

''Cada que (José) lanzaba, o me pedía un cuadrangular o yo se lo prometía. Y es algo que ha sucedido en tres ocasiones consecutivas, contando el juego de hoy (domingo)'', relató Puig sobre el cuadrangular de tres carreras que disparó en el tercer episodio, sacando la pelota por el rumbo del bullpen angelino, por el pabellón izquierdo.

''Por ello hoy me siento muy contento de haberlo logrado, porque le dimos su primera victoria (A León), además de que, para mí, fue el primer vuelacercas desde mi regreso'', agregó el isleño.

Después vino Grandal, quien había cedido su lugar en la receptoría a Austin Barnes para aparecer en el juego como bateador emergente en el quinto episodio.

''Considero que esa fue la decisión correcta, que Barnes fuera hoy el receptor de De León, ya que lo conoce mejor que nadie, pues vienen de jugar juntos en Oklahoma'', afirmó Puig, quien entregó las carreras que sellaron el triunfo de Dodgers y el de De León con su batazo de cuatro esquinas por el sector derecho en el séptimo capítulo, con el que agregó dos carreras más a la causa local.

Dos cuadrangulares de toletes cubanos para el triunfo de un boricua, se le advirtió a De León, el hombre del momento en el vestuario del equipo de Chávez Ravine.

''Eso mismo estaba pensando yo cuando la sacaron del parque. Se dice que Cuba y Puerto Rico son las dos alas de un pájaro y hoy se vio eso en acción'', señaló el serpentinero de 24 años de edad, quien se fundió en un abrazo con Puig cuando el guardabosques derecho regresaba a la madriguera tras sacarla del parque para su octavo bambinazo del año.

Luego, le recordamos al lanzador boricua sobre algunas similitudes con otro joven abridor del equipo, el mexicano Julio Urías.

''Siempre que Julio se trepa a la loma, voy a respaldarlo, pero no me comparo con él, que es un tremendo lanzador, porque se trata de un zurdo y yo soy derecho''.

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''Es increíble. No hay más palabras para describir lo que viví hoy junto a mi familia, a mis padres y un total de 19 amigos míos. Estuve un poco nervioso en mi primer lanzamiento, pero una vez que logré colocar mi primer strike, me dije a mí mismo, 'tranquilo, que esto es el mismo juego', y me dediqué a atacar la zona'', relató De León.

''Estaba dispuesto a lanzar también en el séptimo episodio, pero respeto las decisiones del manager, pues ese es justamente su trabajo'', concluyó el joven lanzador.

De León se mantuvo sobre el montículo durante seis entradas completas, recetó nueve chocolates, permitió seis imparables y cuatro carreras limpias para agenciarse el triunfo en su debut en la Gran Carpa.

Al mismo tiempo, igualó la segunda mejor marca en el total de ponches para un debutante en Grandes Ligas con la franela de Dodgers. Pedro Astacio también había abanicado a nueve bateadores en su debut erl 3 de julio de 1992, en un duelo ante los Filis de Filadelfia

Kazuhisa Ishii encabeza a los lanzadores debutantes de Dodgers con 10 chocolates recetados a los bateadores de Rockies de Colorado el 6 de abril de 2002.

El zurdo Christian Friedrich (4- 10, efectividad de 4.99), abridor de los Padres, lanzó durante cuatro entradas y un tercio, permitió seis hits y cuatro carreras, pero terminó sin decisión.

La derrota se le acreditó al relevista Kevin Quackenbush (7-5, efectividad de 3.88). Por su lado, el taponero azul, Kenley Jansen, retiró a los últimos tres bateadores de San Diego para anotarse con su rescate número 41 de la campaña.

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