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Lo primero es Suecia...

México tiene prohibido pensar en otra cosa que no sea su peligroso y “vikingo” rival de este miércoles. A pesar del maravilloso -es es el término más apropiado- Mundial que propone el futbol mexicano, una caída en Ekaterimburgo le daría un sabor amargo a su existencia y a un torneo donde tuvo la osadía y la capacidad de jugar y vencer a una potencia histórica del juego como Alemania. México se juega todo a las faldas de los Urales, incluso el hecho de que la hazaña del Luzhniki se quede como una simple anécdota. Osorio y “El Chicharito” advierten de la necesidad de concentrarse en el difícil juego que plantea la ultima jornada del Grupo F…

MOSCÚ, Rusia.- Más allá de los Urales, donde el capricho y la imaginación de la geografía dice que termina un continente y empieza otro, México intentará sostener un sueño mundialista.

Y esta vez no se trata de una hazaña o de algo inalcanzable para una selección cuyas cuentas parecen claras en todos los sentidos. Dos partidos, dos triunfos, incluyendo un comportamiento sublime en la presentación ante una potencia del juego como Alemania. México ha hecho hasta hoy un Mundial maravilloso, por encima de sus propias expectativas, pero gran parte de su crédito podría esfumarse si no consigue este miércoles su pase a la siguiente ronda.

México debe salir a ganar ante un rival muy serio, tanto en los futbolístico, en lo físico como en lo mental. Suecia no va a “regalarle” nada al equipo mexicano. Será una dura prueba en cada sector del campo. La selección necesitará de todos los recursos que utilizó ante Alemania y ante Corea del Sur para resolver el enigma que se le presenta en la última jornada del Grupo F.

Me sigue gustando la fortaleza mental del equipo. Javier Hernández, quien ha puesto el ejemplo de liderazgo en la cancha y fuera de ella, fue muy preciso hoy: “Queremos seguir soñando, pero necesitamos poner toda nuestra atención en Suecia. No podemos pensar en lo que sigue si no resolvemos primero el pase a los octavos de final”. Lo mismo advirtió el entrenador Juan Carlos Osorio: “Suecia es un equipo que exigirá lo mejor de nosotros”.

México tiene prohibido pensar en el quinto partido o en alguna otra meta en este Mundial sin antes finiquitar lo que comenzó en el tono más alto el pasado 17 de junio en el Estadio Luzhniki. La selección mostró que tiene el futbol, el talento y la personalidad para alcanzar niveles jamás antes vistos en un combinado mexicano en una Copa del Mundo. Siendo ese “el techo”, México aspira a algo más: terminar una fase de grupo con tres victorias -nunca se ha logrado- y presentarse como un contendiente fuerte y motivado en los octavos de final. Ya habrá tiempo de descifrar los peligros del enfrentamiento en la siguiente fase. Puede ser Suiza, Serbia o un “peso completo” llamado Brasil. Pero lo primero es resolver lo que esta enfrente: se llama Suecia, es peligroso y puede transformar un Mundial maravilloso en una experiencia de sabor amargo.

@Faitelson_ESPN