LAS VEGAS -- Ambos boxeadores dieron el peso. Pero Manny Pacquiao puso el color en las tribunas del MGM Grand Arena de Las Vegas.
Cientos de aficionados llegaron temprano a la sede de la ceremonia de pesaje para ver de cerca a los peleadores, sobre todo a Pacquiao, cuyo arrastre e idolatría es a prueba de todo, incluido el tiempo.
“Manny sigue siendo Manny y va a noquear a Keith Thurman“, advirtió una aficionada de origen asiático que llegó desde las 7 a.m. a las afueras de la arena para conseguir uno de los lugares más cercanos al escenario de la báscula. “Ha dado tanto al boxeo que es una leyenda. Tal vez es la última ocasión que lo vemos, así que tenía que estar cerca de él“.
La arena sólo fue abierta a un tercio de su capacidad, que se llenó casi por completo a ritmo de música, bailes y mucho ambiente, muy similar a lo que sucedió en mayo pasado, cuando llegaron al pesaje Saúl 'Canelo' Álvarez y Daniel Jacobs.
La gran diferencia es que en el MGM Grand este viernes nadie, o casi nadie, podía pensar que Thurman dará la sorpresa cuando se enfrente a Pacquiao con el cetro Welter de la Asociación Mundial de Boxeo de por medio.
Así también ha quedado demostrado entre los apostadores, que conforme se acerca la pelea, cada vez más ven ganador al senador filipino.
Pacquiao era el desfavorecido en las apuestas cuando anunciaron la pelea. Es el boxeador con 40 años y siete meses de edad; 10 años mayor que Thurman, quien es más alto, luce más fuerte, tiene mayor alcance y llega con su invicto récord en 29 peleas, incluyendo 22 nocauts.
Pero en los últimos días, Pacquiao se disparó hacia arriba. El lunes estaba -145, es decir que por 145 dólares apostados a su favor, en caso de una victoria, el pago sería de 100 dólares. Este viernes ya estaba -170.
“Todo el dinero ha sido a favor de Pacquiao“, dijo John Murray, director del Westgate Sportsbook al periódico Las Vegas Review Journal. “Sin importar el precio, Pacquiao es el único lado en el que la gente quiere apostar“.
Como es costumbre, Pacquiao dio el paso sin sudar ni acongojarse. Thurman tuvo que sudar extra y al final marco idénticas 146.5 libras.
Así que este sábado hay pelea entre Thurman y Pacquiao, quien ha estado en ese mismo lugar donde hoy pasó por la báscula, en 14 ocasiones anteriores.
“Voy a tratar de agradar a todos estos aficionados“, dijo Manny. “Hacen un esfuerzo grande y me han acompañado en todo este viaje de tantos años. Verán que no voy a defraudar“.