La ficha salta con apenas analizar los números: Agustín Canapino mejoró, y mucho, su rendimiento en el segundo día de actividad en pista de las 500 Millas de Indianápolis, sexta fecha de IndyCar, que se vive por Star+. No solo hay que quedarse con el dato de la posición, que ya de por sí es brillante: 15º. Es bueno desmenuzar un poco el rendimiento, más allá del puesto.
Canapino completó 84 vueltas al mítico óvalo. En la primera parte de las seis horas que duró la tanda, el argentino giró poco. De hecho, estaba clavado allá lejos, en el 34º lugar. Cuando quedaban dos horas para el cierre de la actividad, el Titán salió a hacer un stint largo y veloz. Allí, rápidamente trepó en el clasificador hasta llegar al 14º puesto, con una clara mejora con respecto a lo realizado 24 horas antes. El promedio de velocidad, el elemento de medición en las 500 para armar la grilla de partida, del miércoles fue de 362,789 km/h, contra los 364,754 km/h del jueves; casi dos km/h más veloz. Por supuesto, eso se vio reflejado en el tiempo: 39s9242, contra 39s7091. Y, con respecto a la diferencia con la punta, el miércoles había quedado a 6,45 km/h de Takuma Sato, el más veloz. En cambio, el jueves, la brecha con Marcus Ericsson (dominó la tanda) fue de 4,76 km/h.
“Un buen día. Hay que ir paso a paso. Estamos trabajando mucho en la parte aerodinámica. Estoy muy contento con el progreso de hoy, pero falta trabajar mucho. Tenemos grandes rivales enfrente, pero estamos bien”, analizó Canapino, quien agregó que “los autos van a una velocidad enorme acá”. Su velocidad máxima alcanzada fue de 379,240 km/h.
Dentro del equipo de Ricardo Juncos cerraron un día agridulce. El gran trabajo de Canapino contrastó con el de Callum Ilott, el compañero del argentino, quien se ubicó 32º y lejos. Este viernes se disputará otro entrenamiento de seis horas que servirá para ultimar los trabajos de cara a lo más importante de esta semana: la clasificación que comenzará el sábado.